Seis asociaciones de diferente naturaleza -el sindicato Manos Limpias, Denaes, Voces contra el Terrorismo, Hazteoir.org, Libertad e Identidad y el Centro de Estudios Jurídicos Tomás Moro- han presentado este jueves una querella ante el Tribunal Supremo contra los seis jueces del Tribunal Constitucional que avalaron la presencia de Bildu en las elecciones del pasado día 22.
La querella defiende que el presidente del Alto Tribunal, Pascual Sala y los magistrados designados por el PSOE Eugeni Gay, Elisa Pérez Vera, Pablo Pérez Tremps, Luis Ortega y Adela Asúa, cometieron presuntamente un delito de prevaricación al rehabilitar las listas de la coalición formada por EA, Alternatiba y candidatos proetarras que el Tribunal Supremo había ilegalizado previamente.
El escrito subraya que la decisión que llevó a estos seis magistrados a validar la presencia de Bildu en las urnas fue tomada "a sabiendas de su injusticia, apartándose el TC del contenido de sus funciones jurisdiccionales".
La querella enfatiza en que los magistrados designados por el PSOE han "desacreditado sin ningún tipo de pudor ni rigor y sin efectuar valoración de los mismos en su conjunto" los documentos que llevaron al TS a ilegalizar a Bildu.
Además, las asociaciones añaden en su escrito que la jurisprudencia del Tribunal Supremo y del Tribunal Constitucional han reconocido que, "a menudo, la prueba de indicios es la única que permite discernir y descubrir el entramado y la finalidad fraudulenta de las agrupaciones, coaliciones y grupos políticos que pretenden sucederse dando continuidad a partidos y estructuras ya ilegalizadas y vinculadas a entramados terroristas".
Sentencia preconstruida
Por otro lado, los querellantes señalan que dado "el escasísimo plazo de tiempo con el que han contado los magistrados para desarrollar su labor es absolutamente imposible que dicha labor se haya podido desarrollar sin que se hayan vulnerado las normas de procedimiento, estamos en la seguridad, como estamos convencidos que será acreditado, que la sentencia dictada por el TC se encontraba, desde el inicio, pre-construida".
Asimismo, en el documento judicial se recogen las ideas principales de los demoledores votos particulares de los magistrados del TC que se mostraron contrarios a la legalización de Bildu. En dichos votos discrepantes se señaló que el TC había rebasado los límites de su función de control constitucional propia del recurso de amparo, convirtiéndose este tribunal en una suerte de "supercasación".
La querella se ha registrado en el Tribunal Supremo pasadas las 12:30 horas de este jueves por representantes de todas las asociaciones. El común denominador de todos los denunciantes es "la indignación" y "traición" cometida por los seis jueces del intérprete supremo de la Constitución.