El presidente de la Junta, José Antonio Griñán, ha considerado este martes que la actuación realizada por el exdirector general de Trabajo Francisco Javier Guerrero, imputado por el caso de ERE, es "un hecho concreto" que está siendo investigada en los juzgados. Si bien, ha querido dejar claro que en 30 años de gobiernos socialistas en Andalucía no ha habido "ni un solo alto cargo condenado".
En declaraciones a la cadena Ser recogidas por Europa Press, tras ser preguntado por la declaración ante la Policía del que fuera chófer de Guerrero, quien aseguraba que él y el alto cargo socialista dedicaron la mayor parte de las ayudas recibidas por la Junta para "comprar cocaína", Griñán ha dicho que son unos hechos que se remontan a principios de 2004 y que es "de sobra conocido" que el Gobierno que preside "denunció los casos irregulares que se conocieron".
El líder del Ejecutivo andaluz ha destacado que la actuación de su Gobierno no solo se limitó a la denuncia, sino que se creó dentro de la Administración un equipo de funcionarios que revisaron cada uno de los expedientes, siendo remitidos a la justicia aquellos donde se encontró algún tipo de irregularidad. "Además, nos presentamos como acusación. Fuimos acusadores, somos denunciantes y, al mismo tiempo, somos también promotores de la acusación contra todo delito que se haya podido producir", ha añadido.
En esta línea, Griñán ha pedido que se ponga un ejemplo de un Gobierno que haya hecho lo mismo que el suyo, "que denunció y acusa para que se llegue hasta el final y se recupere aquello que se haya podido defraudar". El presidente ha querido destacar que en el mismo momento que se denunciaba públicamente que se podía haber comprado cocaína con los fondos de empleo, "había dos presidentes de comunidades sentados en el banquillo".
La Junta pide que no se mezcle a Griñán con "personas deshonestas"
Poco antes, la consejera de la Presidencia y portavoz del Gobierno andaluz, Mar Moreno, ha pedido este martes a la Justicia que actúe "con contundencia" contra el exdirector general de Trabajo y Seguridad Social Francisco Javier Guerrero, imputado en el caso de los ERE tramitados por la Junta, y ha reclamado que "no se mezcle" a los miembros del Ejecutivo autonómico, incluido su presidente, José Antonio Griñán, con "personas deshonestas".
Moreno se ha pronunciado de este modo al inicio de la rueda de prensa posterior a la reunión semanal del Consejo de Gobierno para valorar las últimas informaciones relativas a la declaración ante la Guardia Civil del que fuera chófer de Guerrero, J.F.T.B., en cuanto a que parte de los 900.000 euros que recibió este exdirector general en subvenciones otorgadas por la Junta los destinó a comprar cocaína.
"El Gobierno andaluz no va a entrar en el destino que el señor Guerrero u otras personas hayan podido dar o no a los fondos que se hayan podido defraudar, esa es una cuestión que tendrán que determinar los tribunales", ha señalado en primer lugar la titular andaluza de la Presidencia, que ha recordado que "no estamos ante un caso nuevo, sino que estamos hablando del mismo caso de los ERE, y no es algo que haya ocurrido hoy ni ayer, ya que estas ayudas en concreto se concedieron en febrero de 2004 y la Junta naturalmente las ha puesto en conocimiento del juzgado".
Tras proclamar que "no hay quien le gane al Gobierno de Griñán condenando este caso", Moreno ha querido dejar claro que desde el Ejecutivo andaluz "no es que no vayamos a perder ni un minuto defendiendo al señor Guerrero, es que este Gobierno le está acusando, mirando con lupa la gestión de este señor y queremos que la Justicia actúe con contundencia no sólo por el daño que se haya podido causar a los recursos públicos, sino por el inmenso daño que le está causando a la imagen del Gobierno andaluz".
"Nos repele que se nos quiera mezclar con personas deshonestas"
"Al presidente Griñán, a mí y a todos los miembros del Gobierno nos repele este asunto y que se nos quiera mezclar con personas deshonestas", ha señalado la consejera, que ha resaltado que "a diferencia de otros gobiernos que hoy tienen incluso a sus presidentes sentados en el banquillo, nosotros – la Junta – no tapamos, no justificamos, no defendemos a nadie que pueda ser culpable, sino que lo que estamos haciendo es denunciar, colaborar con la Justicia, llevar cada papel, investigar hasta el fondo, porque queremos que caiga todo el peso de la Ley sobre quien se haya aprovechado de un solo euro de los andaluces".
En este sentido, Moreno ha querido dejar claro que desde la Junta "no estamos quitando ni un gramo de gravedad a este asunto y estamos combatiendo a muerte en los tribunales como corresponde a un gobierno honesto", aunque sí ha criticado que "el PP desvía una y otra vez la atención, incluso procesalmente como hemos tenido oportunidad de demostrar hasta la saciedad, sobre lo que nos parece el objetivo fundamental, que es sentar en el banquillo a quien se haya aprovechado y utilizado recursos públicos para cualquier finalidad que no fuera la prevista por la ley".
En su opinión, "cuando PP insiste en pedir una y otra vez responsabilidad de Griñán en este asunto sólo está desviando la atención" por medio de "trampas procesales", ya que ha señalado que las ayudas a que se refiere la declaración del exchófer de Guerrero "se conceden en el año 2004, cuando Griñán era diputado en el Congreso y ni siquiera formaba parte del Gobierno andaluz".
"Toda la manipulación que realiza el PP tiene clara intencionalidad electoral", ha lamentado Moreno, que ha subrayado, en cualquier caso, que "ello no le quita gravedad al asunto y por eso aquí hay un gobierno que no tapa, que no justifica, sino que persigue, que destapa, que investiga y que quiere llegar hasta el final de este asunto".
Para la consejera, los nuevos datos que han salido a la luz sobre el caso de los ERE van en la dirección que desde hace varios meses apuntaba la Junta, que el fraude se genera en torno a la Dirección General de Empleo en la etapa de Guerrero, y ha expresado que no cree que los consejeros de Empleo en ese momento "tuvieran idea de los hechos delictivos" que se estaban produciendo.
Preguntada sobre si la Junta está preocupada por las amenazas de algunos implicados de "tirar de la manta", la consejera se ha limitado a señalar que si hay "manta, que se tire de la manta hasta el último cabo". "Si hay una manta de la que tirar, ya se está tardando", ha sentenciado.
Asimismo, la consejera, que ha asegurado que si Guerrero hubiera seguido siendo un cargo público de la Junta cuando estalló el escándalo de los ERE, no hubiera durado ni un minuto en el puesto, ha querido poner de manifiesto que en 30 años de gobiernos socialistas en Andalucía, ni un alto cargo se ha sentado en el banquillo, a diferencia de lo que ha ocurrido con gobiernos del PP en otras comunidades.
Ha señalado que la primera responsabilidad de un Gobierno decente y honesto es "no tapar y denunciar", algo que el Ejecutivo de José Antonio Griñán está haciendo a "rajatabla".