Antonio Sanz Cabello vuelve a la política andaluza y ha anunciado ya su candidatura para presidir el PP de Cádiz, territorio en el que ha desenvuelto la mayor parte de su vida política.
En 1999 fue elegido nuevo secretario general del PP andaluz con el apoyo expreso de Javier Arenas, lo que le supuso el alejamiento personal y político de otros cachorros amamantados en las ubres del líder, que aspiraban a la misma posición. El caso más llamativo fue el de José Luis Sanz, actual secretario general tras la dimisión de Arenas, colofón ansiado de su carrera tras la ascensión de Juan Ignacio Zoido a la presidencia.
En el año 2004, tras la derrota del PP nacional destrozado por el atentado terrorista del 11-M, Antonio Sanz fue descabalgado de la secretaría general. Javier Arenas, que fue sustituido en la presidencia del PP andaluz por Teófila Martínez tras su marcha a Madrid en 1996, volvió a la política andaluza y la alcaldesa de Cádiz tuvo que dejar la presidencia para cedérsela, pero exigió que todo el mundo bajara un "escalón", como había hecho ella. Ello implicó que Juan Ignacio Zoido, recién llegado de la Delegación del Gobierno en Castilla la Mancha, se hiciera cargo de la secretaría general.
En el año 2006, Javier Arenas volvió a situar a Antonio Sanz en la secretaría general desarrollando aún más el descontento de los viejos cachorros del PP, sobre todo de Sevilla.
Tras la amarga victoria electoral de 2012, inesperada por el gobierno Rajoy, Arenas tuvo que dejar la presidencia del PP andaluz de manera definitiva, aunque trató de situar de nuevo a Antonio Sanz en un puesto relevante de la organización, operación que fue abortada desde la dirección nacional del PP, vía secretaria general, María Dolores Cospedal, así como por algunos presidentes provinciales del PP andaluz para los que Sanz ha sido durante años la larga mano dura de Javier Arenas. La crisis ha sido provisionalmente resuelta con la proclamación de Juan Ignacio Zoido como presidente y la elevación del Presidente del PP sevillano, José Luis Sanz, a la secretaría general.
Aunque para muchos parece una decisión inesperada dada la aparente inclinación de Antonio Sanz de seguir a su amigo y jefe en la nueva aventura madrileña, la juventud del popular gaditano -44 años- y su enorme grado de influencia en la provincia de Cádiz hacían previsible que no se resignara a perder el poder territorial que confiere la presidencia del PP de Cádiz hasta ahora ostentada por su amigo, José Loaiza, además presidente de la Diputación y alcalde de San Fernando, que ya ha aceptado e impulsado la candidatura de Sanz y su propia renuncia.
No se olvide que el trabajo de Sanz en la provincia gaditana ha hecho posible que el PP gobierne con mayoría absoluta en ayuntamientos emblemáticos como Jerez, Algeciras, Puerto de Santa María y San Fernando, además de otros menores -Cádiz capital siempre fue mérito de Teófila Martínez- y en la Diputación Provincial, por vez primera desde 1979.