El Partido Popular aguanta la respiración algunas horas más a la espera de que el Tribunal Superior de Justicia de Madrid levante el grueso del secreto sumarial del caso Gürtel a partir de esta medianoche. Con el susto en el cuerpo, Mariano Rajoy ha reunido este lunes en la sede nacional de su partido al Comité Ejecutivo Nacional, a quien ha prometido "contundencia" ante comportamientos irregulares que puedan dañar la imagen del PP.
"Tenemos un compromiso de ejemplaridad, no vamos a consentir actuaciones impresentables ante la opinión pública... hemos tenido un cuidado especial, hemos actuado y vamos a seguir actuando", ha dicho el líder de los populares, según ha reproducido su número dos, María Dolores de Cospedal, en rueda de prensa.
"No hay financiación irregular"
Públicamente, en el PP aseguran estar "tranquilos" ante lo que pueda decir el TSJM ya que, según interpretan, de los 50.000 folios que el martes se hacen públicos no se pondrá decir, en ningún caso, que el partido haya cometido financiación irregular.
Sin embargo, de puertas para adentro sí que reconocen "preocupación" ante la posibilidad de que una nueva retahíla de datos incriminatorios pueda volver a poner contra las cuerdas a Rajoy, quien -según un miembro del órgano interno, en conversación informal con Libertad Digital- mantuvo durante toda la reunión un tono "serio y distante".
Ya en el turno de réplica, cabe destacar la intervención del presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo. Ante un Comité semivacío -"es lunes de Pascua, festivo en varias comunidades", se excusaban en Génova-, el barón autonómico ponía el acento en la firmeza promulgada por Rajoy, y resaltó: "hay que ser claros y concisos". Un mensaje que transmitía poco después a los periodistas, cuando apuntó que el PP es un partido "irreprochable" contra la corrupción y como tal va a seguir aplicando "contundencia dentro de cualquier desviación".
La doble vara de medir del PP: Matas y Bárcenas
"Si unos pocos quieren hacer daño a otros muchos se equivocan", zanjó Feijóo. Un argumento también esgrimido por Cospedal, que, sin embargo, volvió a poner en evidencia la doble vara de medir del partido dependiendo de quien sea la víctima judicial.
Y es que, pese a decir que no iba a entrar a "enjuiciar" si el caso de Jaume Matas -imputado en el escándalo ‘Palma Arena’- era más o menos grave que el de Luis Bárcenas -implicado de lleno por la trama Gürtel-, la número dos del PP defendió los privilegios del segundo y marcó distancias, más aún si cabe, con el primero.
"Si Bárcenas tiene un lugar aquí -el ex tesorero mantiene despacho y abogada en la sede del PP- no tiene por qué escandalizar a nadie, por supuesto que no puede escandalizar a nadie", aseguró Cospedal, para a renglón seguido añadir que no ve "un privilegio" que Génova le pague su abogado ni tampoco "una contradicción" con su discurso de firmeza.
Preguntada, tras esta respuesta, por Matas, la dirigente popular apuntó que "cada caso es distinto" aunque ambos estén imputados, y que "hay delitos que no son iguales a otros delitos". "El PP tiene que atender a cada caso", zanjó ante la insistencia de los informadores.
Según las fuentes consultadas por Libertad Digital, el propio Rajoy, en su discurso ante el Comité Ejecutivo, se refirió al que fuera su amigo, el ex presidente de Baleares, para poner su cese como ejemplo de que actúa ante quienes dentro del partido han hecho lo indebido. "El PP no puede aceptar una actuación que no sea, ya no legal, sino presentable", esgrimió ante los suyos.
En este sentido, Cospedal recalcó que la semana pasada se eligió una nueva dirección del PP de Baleares y que, si bien se mantienen cargos de la era de Matas e incluso imputados por delitos de corrupción, va en la línea de la "renovación" y demuestra la apuesta de su presidente, José Ramón Bauzá, "por la honestidad y la lealtad". "Ésa es la referencia ahora en Baleares", concluyó, para después destacar que Bauzá también está investigando por su cuenta los efectos espurios que afectan a sus siglas.
Aviso a la Fiscalía y presunción de inocencia
Sin dejar el caso Gürtel como telón de fondo, que ha monopolizado la conferencia, la secretaria general del PP también ha avisado que revisarán con lupa el auto que se hará público el martes tras denunciar la parcialidad de la Fiscalía ante los casos que afectan a su partido. "Lo que quiere el PP es que los comportamientos judiciales sean exactamente los mismos" independientemente de "la orientación política" de los afectados, indicó. Fue entonces cuando vino la única referencia de apoyo a Matas: "El auto del juez no es el más ejemplar que hemos conocido de toda la judicatura, lo que tienen que hacer los jueces es aplicar la ley y no elaborar juicios de valor".
Por último, Cospedal insistió en defender la presunción de inocencia porque "estar imputado en este país no significa estar condenado". Enérgica, la número dos del PP llegó a decir que si tal extremo se produjera "todo el mundo estaría en la cárcel" por lo que pidió un respeto a quienes hoy se sientan en el banquillo de los acusados.