Mariano Rajoy ha hecho pública la gran preocupación que existe en el Partido Popular ante la situación de acoso total que sufren sus dirigentes en la Región de Murcia desde que el Gobierno de Valcárcel aprobara las medidas de ajuste para afrontar la recesión económica.
"Ha habido manifestaciones delante de la casa del presidente, le han tirado huevos a la casa, se ha insultado a su hija", resumió el jefe de la oposición; cuyo relato bien parecía al del periodo que transcurrió desde los brutales atentados del 11-M a las elecciones o tras el apoyo de España a la guerra de Irak, cuando las personas con carnet del PP fueron acosadas incluso en sus propios domicilios.
Por todo ello, y una vez el consejero Pedro Alberto Cruz fue agredido, Rajoy telefoneó al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, para reclamarle que tales acontecimientos no se volvieran a reproducir. Extremo que consiguió, y que después le fue reiterado por el titular de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba.
"Le hemos pedido al Gobierno que corte de raíz estas cosas", insistió el líder del PP en declaraciones a RNE, incluyendo en esa inquietante radiografía que, desde hace días, no se pueden realizar actos del partido con tranquilidad.
Es por ello por lo que, de primeras, hace suya la petición de Valcárcel de que el delegado del Gobierno, como responsable de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, no puede estar "ni un minuto más" en su puesto. Y es que, a ojos de Rajoy, Rafael González Toval "no ha estado a la altura de las circunstancias" ya que es él "quien tiene la obligación de proteger las libertades y los derechos de las personas".
Por su parte, también reclamarán explicaciones al ministro del Interior en las Cortes Generales, siendo este mismo martes con el Senado como escenario cuando Rubalcaba se tenga que enfrentar a una pregunta del Grupo Popular en este sentido.
"Al consejero le han partido la cara de una manera brutal, con saña y de una forma cobarde e impropia de un país decente", sentenció el jefe de la oposición, que anunció -eso sí- que no se teme por el ojo del paciente, si bien tendrá que estar todavía varios días guardando reposo.
Cospedal: "La violencia genera violencia"
También sobre este asunto, su número dos, María Dolores de Cospedal, acusó al PSOE de generar un “clima de alteración social”, y en este punto quiso dejar bien claro que “la violencia genera violencia” y da pábulo a energúmenos como los que agredieron al consejero murciano.
Tras enfatizar que el PP no culpa a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado sino a sus “mandos políticos” de inacción, la secretar general machacó la idea de que “hay que tener mucho cuidado en el ejercicio de la política” teniendo claro “qué líneas no se pueden cruzar”. Avanzó que el PP tiene prevista una batería de preguntas que, al hilo de lo dicho por Rajoy, se plantearán en las cámaras de representación a nivel nacional.