Cierra los ojos, Piqué. Imagínate que llega Isabel Gemio y te susurra: "Hay una carta para ti".
– ¿Para mí? ¿Quién la envía? ¿Mas, Duran...?
– Frío, frío.
– No hagamos de esta adivinanza el eje de nuestra conversación. Dímelo ya.
– Es de un compañero de partido.
– ¡Alberto!
– No es de Alberto Fernández.
– ¿Quién dijo Fernández? Me refiero a mi Alberto. A Ruiz Gallardón.
– Pues no. Un compañero del PPC.
– En el PCC sólo tengo un compañero, así que tendrá que ser de Vendrell.
– Frío.
– Bueno, también tengo una compañera que se llama Montserrat Nebrera, pero, al igual que yo, no es del partido. Quiero decir que cuando yo entré... Es igual, déjalo.
– Es un miembro del Comité Ejecutivo, y es vocal electo...
– No conozco a nadie en esa organización que presido.
– De todos modos, querido Josep, te leeremos el principio de la carta.
– Sí, pero desde la centralidad, por favor. Y si dice algo contra los nacionalistas, omítelo, porque esas cosas de la derecha rancia y españolista de siempre nos moles... quiero decir, les molestan mucho.
– Y tú no quieres molestar a nadie, ¿no?
– A nadie que no sea del PP.
– Pues leeremos sólo las primeras líneas, para probar. Abrimos el sobre. Extraemos la hoja doblada...
– No hagamos de esto el eje...
– Ya, ya. Leo: "Apreciado presidente, una vez más tus declaraciones se han convertido en un arma al servicio de los adversarios del Partido Popular, lo que me demuestra de nuevo la desconexión que tienes respecto a la forma de pensar de muchísimos de los militantes y simpatizantes del partido que presides en Cataluña." ¿Sigo?
– Gracias, Isabel.
(Aplausos del público)
– De nada.
– Estoy emocionado. ¿Cómo se llama el remitente?
– Si te digo que es el secretario de Economía Productiva...
– Ahora mismo no me acuerdo.
– Se llama Emilio Santiago.
– Qué amable, Emilio Santiago. Gracias.
– Adiós, querido Josep.
– Adiós, Isabel. Adiós a todos. Ejem, ejem. ¡Tú, ponme con Vendrell!
Abre los ojos, Piqué.
