Menú
Pedro de Tena

La UCOgrafía como remedio a la desvergüenza

Para saber la verdad de lo ocurrido en Valencia, los hechos probados e indiscutibles, nos haría falta una investigación de la UCO judicial.

Para saber la verdad de lo ocurrido en Valencia, los hechos probados e indiscutibles, nos haría falta una investigación de la UCO judicial.
Pedro Sánchez y Carlos Mazón en Valencia | EFE

Esta pasada semana ha sido un tiempo de desesperación. La política nacional, eso que alguna vez se consideró era la búsqueda del bien general de forma decente y sin meter la mano en el cazo, se ha convertido en un fangal insoportable. Nadie sabe con precisión quién miente y quién no porque se enloda a los medios de comunicación, a los canales de Internet, blogueros y webs con falsedades o medias verdades, que son mentiras dobles.

Vamos poco a poco camino de los 300 muertos en una riada, un tsunami interior, tal vez la más terrible de la España contemporánea, y en vez de acelerarse el sistema de ayudas para que pueda siquiera comenzar a revivir de la DANA y aunar esfuerzos para que la desgracia no sea tan cruel, ahí andan los políticos, unos más que otros, dando un pésimo ejemplo de patriotismo. Para demasiados de ellos, la verdadera patria es el partido, lo que es la muerte de toda democracia.

Por dejar con el culo al aire la absurda propaganda política, que no ecologista, de Pedro Sánchez y su perverso aparato político, recordemos que, a menos que el manipulado cambio climático estuviera conspirando contra la vida de los españoles hace dos siglos y medio, que el gran Joaquín Costa ya se refería a las terribles inundaciones de 1775 que se originaron en el Barranco del Poyo y su efecto letal sobre Chiva y otras poblaciones.

Costa, al que tanto echamos de menos en esta España huérfana de patriotas, citaba las observaciones del especialista Antonio Josef Cavanilles Palop[i] sobre la cíclica peligrosidad de dicho Barranco:

Su profundo y ancho cauce siempre está seco , salvo en las avenidas quando recibe tantas aguas y corre tan furiosamente , que destruye quanto encuentra. En 1775 causó muchísimas desgracias en Chiva, sorprehendiendo á media noche sus vecinos; asoló un número considerable de edificios, esparciendo por mas de dos leguas los tristes despojos y los cadáveres de los pobres que no pudieron evitar la muerte.

Pero no, ese no ha sido nunca el problema, dos siglos y medio después. En todo ese tiempo y en 40 años de democracia, y a pesar de que ha habido tragedias sucesivas, nadie ha actuado sobre este Barranco mortal. Cómo impedir estas tragedias periódicas apenas ha preocupado a ningún político, salvo, eso sí, a un denostado y condenado, post mortem, Franco que desvió el cauce del Turia a su paso por Valencia, lo que ha salvado muchas vidas desde entonces. Es más, la izquierda valenciana, Joan Ribó, exlíder de Compromís, otro imputado, intentó devolver el Turia a su viejo cauce asesino.

Pero no. El problema para los políticos en España, con las excepciones que sean justas, es que el chivo expiatorio de todo este gigantesco funeral sea del partido contrario. La izquierda social-comunista ya tiene su ninot para quemar en estas fallas anticipadas: Carlos Mazón, del PP de Zaplana y Pablo Casado, ingenua y torpe presa para quienes, como el demostrado felón Pedro Sánchez, lo aprovechan todo, hasta las tragedias como el Covid y esta riada para imponer sus intereses, desde arrebatarle la alcaldía de Requena al PP en plena tragedia a colarle la foto de su futura candidata, ya verduga, Diana Morant en la rueda de prensa conjunta.

Que no es muy lúcido se sabe porque ha consentido tener en vilo a todo el país porque se empeñaba en ocultar con quién había comido "trabajando" el martes horrible de la DANA, estando ilocalizable durante varias horas. Ahora que ya se sabe lo de su almuerzo con la periodista Maribel Vilaplana, a mi no me cabe duda de que tiene que dimitir más que nada por bodoque y por insensible, pero espero que al PP no se le ocurra dejarlo caer antes de exigir la caída de los verdaderos responsables actuales de la tragedia de la DANA valenciana.

Pero, los verdaderos responsables ¿qué hicieron? Para saber la verdad, los hechos probados e indiscutibles, nos haría falta una investigación de la UCO judicial, lo que ya he llamado alguna vez una UCOgrafía del comportamiento de unos y otros en esta DANA. A ver si entendemos de una vez la necesidad imperiosa de contar con un Poder Judicial que no esté al servicio de ningún Gobierno.

Están relacionados en la Ley de Seguridad Nacional con toda precisión y debería ser el Congreso de los Diputados el que lo demandara. Dice la Ley que entre sus objetivos tiene la gestión de una crisis y que, en ella, los responsables máximos son el Presidente del Gobierno, los Ministros, el Consejo de Seguridad Nacional y el Delegado del Gobierno en la Comunidad Autónoma. Felipe González acaba de recordar cómo ordenó al Ejército ayudar a Vizcaya cuando las inundaciones del 26 de agosto de 1983, las más asesinas de los últimos 500 años, arrasaron Bilbao, Durango, Llodio o Bermeo. Sin más. Y sólo hubo 34 muertos.

No. No es lo que ha hecho este gobierno ni su presidente, que están encharcando el patio nacional, como lo hicieron durante la pandemia en la que se lucraron algunos de sus miembros, para eludir sus gravísimas responsabilidades que, en mi opinión, deben tener una consideración penal. Pero la máquina del fango ya está en marcha. Mazón, dimisión. Sí, pero primero las demás, cuando menos, las de Pedro Sánchez, Marlaska, Robles y Ribera, los cuatro jinetes del apocalipsis valenciano. Qué poca vergüenza con los muertos de cuerpo presente.


[i] Cavanilles Palop, Antonio Josef - Observaciones sobre la Historia Natural, Geografía, Agricultura, Población y Frutos del Reyno de Valencia. Imprenta Real, Madrid ,1795. Dos tomos. La referencia está en el tomo I, página 159.

Temas

En España

    0
    comentarios

    Servicios

    • Radarbot
    • Libro
    • Curso
    • Escultura