Víctor de Aldama confirmó hoy que se vio con Pedro Sánchez por lo menos una vez más tras la famosa foto en el acto del PSOE de febrero de 2019 ("gracias por lo que estás haciendo; me tienen informado"). Fue en la fiesta de cumpleaños de Ábalos celebrada en diciembre de 2019 en un restaurante propiedad de... Víctor de Aldama. Esta fiesta dará mucho que hablar en el futuro. Conozcamos sus detalles.
Efectivamente, Ábalos celebró su 60 cumpleaños el 8 de diciembre de 2019. De la logística de la fiesta se ocupó, cómo no, Koldo. Fue él quien mandó las invitaciones, gestionó las confirmaciones y, en general, se preocupó de que todo saliese al gusto del jefe. El local elegido fue un restaurante propiedad de Aldama en la zona de las Cuatro Torres de Madrid. Aún no ha salido a la luz quién pagó el fasto. Cuesta imaginar, en todo caso, a Aldama acercándose a Ábalos al final de la fiesta, factura en mano, para decir: "Su cuenta. ¿La abonará con tarjeta o en efectivo?". Recordemos que el piso de Jessica, la novia de Ábalos, la había empezado a pagar Aldama en marzo de ese mismo año; Aldama, pues, ya estaba pagando a Ábalos por sus favores (Jessica, por cierto, no acudió a la fiesta; lo hizo la entonces mujer de Ábalos).
La lista de asistentes de la fiesta incluyó la plana mayor del PSOE. Estuvieron Pedro Sánchez y Begoña, María Jesús Montero, Santos Cerdán, Félix Bolaños, Carmen Calvo y demás gerifaltes del PSOE y del Gobierno. Muchos (incluyendo los Sánchez-Gómez) acudieron con algún hijo. El horario elegido (a partir de las 18:45) invitaba a que la celebración fuese familiar. La ocasión debía ser entrañable.
A esas alturas, Aldama no sólo conocía a Sánchez. También conocía a Begoña. Había coincidido con ella en San Petersburgo en septiembre, apenas dos meses antes. Fue durante ese viaje que Begoña pidió a sus escoltas que le dejasen sola con Javier Hidalgo y Aldama en la habitación del hotel. Hoy Aldama también ha admitido ese encuentro. Lo ha descrito como una "tertulia" entre los tres. Por desgracia, no ha entrado en los detalles de lo ahí hablado.
Por tanto, para cuando Ábalos celebró su cumpleaños en diciembre, Aldama ya era un viejo conocido de los Sánchez-Gómez. Cuesta muchísimo imaginar que llegasen ambos al local de Aldama y éste no saliese a recibirles y a atenderles. Era su local. Estaría faltando a su deber hostelero más básico si no saludase al presidente del Gobierno y a su esposa al llegar éstos a su local. Fuese su conversación más corta o más larga, refutaría la afirmación de Sánchez de no haber cruzado nunca una palabra con Aldama.
¿Dónde está la foto o el vídeo de ese encuentro? Al parecer, "no se podían hacer fotos porque había un fotógrafo oficial del establecimiento". Es decir, un fotógrafo de Aldama. Todo apunta a que Aldama tiene esas fotos y que las hará públicas cuando lo considere oportuno.
Pero, hay un detalle más que hace de esta fiesta de cumpleaños un evento absolutamente clave en la trama de corrupción que asola al Gobierno. Como atestigua el informe de la UCO de octubre, un día después de la fiesta de cumpleaños, el 9 de diciembre por la noche, Aldama mandó a Koldo un borrador de carta de invitación a Delcy Rodríguez a España. La carta, que hablaba de las oportunidades de colaboración que surgían tras ser "embestido" presidente Sánchez, debía firmarla Ábalos como secretario de organización del PSOE. La invitación fue cursada y Delcy llegó a España el 20 de enero de 2020, poco más de un mes más tarde. Todo apunta a que se habló de la visita de Delcy en la fiesta de cumpleaños, delante de Sánchez, y que se encomendó a Aldama redactar la carta de invitación, cosa que hizo diligentemente al día siguiente. Como ha dicho Aldama hoy, Sánchez estaba informado de todo.
En resumen, la fiesta de Ábalos reunió a todos los protagonistas de la mayor trama de corrupción de la era democrática española, incluidos los Sánchez-Gómez. En ella se habló, seguramente, de la visita de Delcy a España. Existen fotos (y quizá vídeos) de la fiesta. Por ahora, están bajo llave. En algún momento saldrán. Y Sánchez habrá dado un paso más para salir de La Moncloa camino de un banquillo.