
Vuelve a errar el PP ante su próximo Congreso de Julio. Encomienda la ponencia sobre Cataluña a Daniel Sirera en detrimento de su líder y presidente, Alejandro Fernández. Esa elección de Alberto Núñez Feijóo lo dice todo. Daniel Sirera se amolda al paisaje sin cuestionar al poder. Nada podrá aportar a la dirección de su partido, porque nunca les dará un diagnóstico que la contradiga. Exactamente lo contrario del actual líder del PPC, Alejandro Fernández, que siendo leal a la dirección, tiene la honestidad de exponer los riesgos y errores de siempre, para vadearlos con éxito. Y los errores más imperdonables son la ignorancia, los complejos históricos ante el catalanismo, y su consecuencia: el apaciguamiento. No conocer la materia emocional, torticera, xenófoba y patológicamente antiespañola que anida en las vísceras del nacionalismo catalanista es un error que siempre se paga y pagará caro.
Cuando ese empecinamiento en el error parte de la ignorancia de lo que es el catalanismo, y persisten los complejos históricos que nacen de ella en su empeño por ignorar la realidad, no cambiará el resultado, sólo se enquistará el error. Lo explica con detalle Alejandro Fernández en su escueto recetario A calzón quitao. Una pequeña joya que se lee de un tirón. No sólo expone un diagnóstico pedagógicamente sencillo (en dos tardes te lo meriendas), sino que ofrece la alternativa para que la nimiedad que es hoy el PP en Catalunya pueda convertirse en alternativa real de la derecha liberal catalana y, con ello, lograr dos objetivos imprescindibles para superar el despotismo nacionalista: demostrar que el constitucionalismo es mayoritario en Cataluña y recuperar la España de la Transición que nos hizo a todos libres e iguales.
Quienes diagnosticamos la toxicidad del nacionalismo catalán desde los años ochenta y diseñamos el antídoto para superarla mediante "Ciudadanos" fracasamos por no haber persistido en el diagnóstico. El PSC se negaba entonces y se niega a combatirlo ahora (ahora ya vive descaradamente de él), y el PP, desde siempre, se ha empeñado en persistir en un diagnóstico erróneo y acomplejado ante la superstición de la burguesía catalanista. C´s logró desacomplejar a millones de catalanes con sólo tres diputados en 2006, incluso ganar las elecciones en Cataluña en 2017 con 36 diputados. Para seguidamente derrochar esa victoria por renunciar a ser lo que lo inspiró. Pero demostró que en Cataluña existe España, y además es mayoritaria. Sólo resta la batalla cultural pendiente, que C´s abandonó.
C´s no sólo fracasó, sino que convirtió su espacio en tierra quemada para que pudiera brotar de sus cenizas de nuevo en el futuro. Perdido para siempre ese espacio sociológico de centro izquierda liberal desacomplejado entre el PSC y el PPC, y extraviado para siempre un PSC antinacionalista, sólo se mantiene en pie un PPC con el alma de un C´s que pudieran representar líderes autonómicos como Alejandro Fernández y líderes nacionales como Cayetana Álvarez de Toledo. Si el PP de Feijóo persiste en el error del apaciguamiento en lugar de dar la batalla cultural sin complejos, volverá a fracasar como fuerza política y como partido nacional.
Obviar el diagnóstico de Alejandro Fernández en A calzón quitao es un grave error. Solo los ignorantes desdeñan los hechos contrastados por la experiencia y se acogen a supersticiones y complejos. Y como uno no puede entender tanta estupidez, ya sólo le queda la sospecha de que Feijóo vive en el líquido amniótico de un galleguismo bien intencionado, que confunde con el catalanismo. El catalanismo desde la irrupción de Pujol siempre ha sido la vaselina del nacionalismo, y éste la vaselina del independentismo. Si Feijóo se empeña en verlo con las gafas de su terruño galleguista, errará. Y España necesita un proyecto nacional valiente, sin complejos ni titubeos. Como hizo C´s en su momento en Cataluña. Y por lo que he leído en el libro A calzón quitao, Alejandro Fernández comulga con el diagnóstico de C´s al cien por cien, eso sí, desde su perspectiva liberal. Si C´s logró ganar al nacionalismo, ¿por qué no un proyecto de centro derecha liberal sin pagar peaje alguno al catalanismo? Y si eso se puede hacer en el centro derecha liberal en Cataluña, ¿por qué no también con Izquierda Española en el centro izquierda? Afortunadamente, en el caso del joven presidente de IE, Guillermo del Valle es de una generación española desacomplejada y lúcida. El antídoto desde la izquierda a los fontaneros, fontaneras y fontaneres de la Moncloa.
Y si Feijóo tiene dudas, sólo ha de reparar en la mafia sanchista que nos gobierna y que en estos días supura pus a granel. ¿Con qué material político se ha engrasado y se sostiene en el poder? Con el apoyo y las tretas mafiosas que durante décadas ha utilizado el catalanismo: victimismo, lawfare, corrupción, chantajes, odio a la nación Española… e impunidad (eliminación del delito de secesión del Código Penal, amnistía y manipulación de las instituciones, incluidos jueces, fiscales, medios públicos, órganos de control sociológicos, escuelas, programa 2000 para nacionalizar conciencias…). La basura del nacional-catalanismo utilizada por el pujolismo y acelerada por Junqueras y Puigdemont ya es el modus operandi del Gobierno español de Pedro Sánchez. Esos españoles que no han vivido en Cataluña ahora saben y viven en directo en España con Sánchez la basura que nos ha gobernado en Cataluña desde 1980. Aprendan la lección de una puta vez.
PD: Les podría hacer un sucinto recetario de su diagnóstico y alternativas, pero prefiero que lean el libro "A calzón quitao". Es un compendio de todos los complejos de los españoles ante ese fraude histórico que es el catalanismo; y cómo superarlos. Merece ser leído en su contexto. En especial por los dirigentes, militantes y votantes del PP de toda España. Sobre todo del resto de España. Empezando por su presidente, Alberto Núñez Feijóo.