OBISPOS LEFEBVRIANOS
Un gesto de misericordia, fruto del Concilio
Reconozco que la tesis no es mía, sino del Director de L’Osservatore Romano, Gian María Vian. La decisión de Benedicto XVI (sabia, valerosa y sufrida) de revocar la excomunión que pesaba sobre los cuatro obispos consagrados en 1988 por Marcel Lefebvre es un gesto de misericordia y de paz con vistas a sanar la dolorosa fractura provocada por aquella desobediencia flagrante. Un gesto que ha sido posible por la grandeza de alma del Papa, pero también porque el Concilio Vaticano II es ya un dato perfecta y serenamente clarificado en el surco de la gran tradición católica.