Menú
Pablo Planas

Los timos del coronavirus

Está pasando exactamente lo mismo que ocurrió en febrero y marzo. El virus avanza y las autoridades no hacen nada, salvo culpar a la gente.

Está pasando exactamente lo mismo que ocurrió en febrero y marzo. El virus avanza y las autoridades no hacen nada, salvo culpar a la gente.
Pedro Sánchez. | EFE

España ya lidera el rebrote del coronavirus en Europa, con 132 contagios por cada 100.000 habitantes. Italia presenta 10 contagios por cada 100.000 habitantes. Son datos del Centro Europeo de Prevención y Control de Enfermedades en los que Fernando Simón no tiene nada que ver. Y a pesar de los malabarismos y la ‘creatividad’ contable del Ministerio de Sanidad, hace ya días que se reportan decenas de fallecimientos a causa del coronavirus. Lejos de estar controlada, la epidemia vuelve a golpear con fuerza a tres semanas del comienzo del curso escolar.

En semejantes circunstancias, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, participa por videoconferencia en un Consejo Europeo extraordinario para abordar la situación política de Bielorrusia. La situación sociosanitaria en España, mientras tanto, es el puro caos, con rebrotes constantes y unas cifras que prefiguran una catástrofe como la que se sufrió en marzo y abril. Médicos y enfermeras constatan que ya es tarde para evitar el desastre, y la sombra del abandono criminal planea de nuevo sobre las residencias de ancianos.

Ese presidente que utilizaba el lenguaje bélico para decir que de esta saldríamos todos juntos y más fuertes es ahora mismo un fantasma. ¿Dónde está el hombre que decía que haría lo que hiciera falta, cuando hiciera falta y donde hiciera falta? ¿Qué ha sido de aquellas arengas tan pomposas? La epidemia se descontrola, pero ahora ya no cabe aducir que no se podía saber. Está pasando exactamente lo mismo que ocurrió en febrero y marzo. El virus avanza y las autoridades no hacen nada, salvo culpar a la gente.

A mayor abundamiento, este Gobierno que no iba a dejar a nadie atrás sólo ha aprobado 3.966 solicitudes de las más de 600.000 recibidas para cobrar el Ingreso Mínimo Vital, según apunta el digital La Información. Así que la gran medida del Ejecutivo contra los efectos económicos de la epidemia, el culmen de la justicia social en España, la caraba en materia de derechos, la paga por la que Pablo Iglesias se daba golpes en el pecho como el rey de la jungla, está atascada en los vericuetos burocráticos de una Administración concebida para burlarse del ciudadano. Prueben si no a hacer cualquier gestión telemática o presencial con la Seguridad Social y nos cuentan.

Algo parecido sucede con los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo, los famosos ERTE de los que tanto presumió la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz. Más de 150.000 trabajadores siguen sin cobrar la prestación del ERTE por fuerza mayor, denuncia en el diario Expansión el Consejo General de Colegios de Gestores Administrativos de España.

Y a pesar del virus y de esos timos, de que no pagan lo que deben ni aún menos lo que prometen, los miembros del Gobierno, con Sánchez e Iglesias a la cabeza, se fueron de vacaciones como si aquí no pasara nada. Luego dirán que siempre han estado al pie del cañón.

Temas

En España

    0
    comentarios