En rueda de prensa tras el Consejo de Ministros, la vicepresidenta De la Vega ha vuelto a poner de manifiesto el apoyo del Ejecutivo al uso del velo islámico en lugares públicos y defiende así las tesis del PSOE de utilizar el pretexto del componente “cultural” de esta prenda.
En este sentido, De la Vega afirmó que el “Gobierno respeta los usos y costumbres religiosas individuales”, por lo que ha defendido así el uso del velo. Además, afirmó que la polémica generada con esta prenda afecta a derechos fundamentales, “que tenemos que garantizar”. Así, la vicepresidenta indicó que están los “derechos a la libertad religiosa, a la identidad cultural y a la propia imagen”.
Sin embargo, la número dos del Ejecutivo ha ido más allá y da por hecho de que la ciudadanía española no considera ningún problema el uso del velo. “Desde el punto de vista social, el uso de símbolos religiosos no genera ningún problema social”, dijo aunque olvidando citar su cruzada contra los crucifijos. “Aquí no hay ningún problema de convivencia”, sentenció.
De la Vega se ha unido así a las mujeres socialistas que se han unido al apoyo al velo. Aunque Aído ha dicho con la boca pequeña que "no le gusta el velo", defendió su uso. Pajín fue más lejos. Dice que es un "símbolo de la identidad" cultural sin criticar que sea precisamente un símbolo de la sumisión de la mujer al hombre.