Menú

El hipódromo de Madrid reabrirá el próximo año tras siete años de inactividad

Unas crines de caballo en movimiento que concluyen dibujando una visible letra "Z", de "Zarzuela", será la identificación del nuevo hipódromo de Madrid, un proyecto renacido tras siete años de deterioro extremo, merced al compromiso firmado este martes por la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) y Patrimonio Nacional.

L D (EFE) En una comparecencia pública en la que los presidentes de ambas sociedades, Ignacio Ruiz-Jarabo y Alvaro Fernández-Villaverde, respectivamente, firmaron el acuerdo que da cobertura al contrato de concesión para la explotación integral del hipódromo de la Zarzuela, ambos responsables coincidieron en la "necesidad" de devolver a Madrid este "gran lugar de encuentro".

Una inversión inicial de 18 millones de euros, que será "suficiente con holgura", según Ruiz-Jarabo, para recuperar las instalaciones tradicionales del hipódromo permitirá que Madrid recupere las carreras de caballos en otoño de 2004, si bien el proyecto más amplio de "ocio y esparcimiento", que estará abierto al público todos los días de la semana, precisará de un plazo de ejecución de 36 meses. Ese plazo, explicó el presidente de la SEPI, será el mínimo necesario para que las instalaciones estén a pleno rendimiento y se pueda plantear su privatización, algo que está en la idea básica del proyecto, y que sucederá "seguro antes de diez años", puntualizó Ruiz-Jarabo.

Explicó también que el proyecto resuelve tres grandes problemas históricos del hipódromo y que se acrecentaron, hasta llegar a su cierre en diciembre de 1996, con la gestión "poco afortunada" del empresario Enrique Sarasola: déficit de instalaciones, al dejar a Madrid sin el único recinto apropiado para carreras de caballos; déficit de espacio, "un millón largo de metros cuadrados en el corazón de Madrid" sin utilidad para nadie y lucro ausente en términos de impacto económico.

Acuerdo por 25 años

La firma del acuerdo de este martes abre una nueva etapa que compromete a la sociedad Hipódromo de la Zarzuela S.A. -participada al 90% por la SEPI y en el 10% por Loterías y Apuestas del Estado (LAE)- a "dotar a Madrid de un recinto con instalaciones de máxima calidad", que incluye una oferta "permanente y continua", con actividades complementarias al mundo de la hípica, "deportivas o de ocio", que aún están por concretar. La nueva sociedad, que nace con 25 años de concesión a partir de este miércoles, "no aspira a maximizar beneficios", sino a "cubrir los gastos de funcionamiento y rentabilizar la inversión" para dar las mayores garantías de continuidad, señaló Ruiz-Jarabo.

"Queremos que sea tremendamente útil, para los españoles y para los madrileños", aseguró, ya que más allá de la oferta de ocio será "un apoyo estratégicamente importante" para ayudar a la candidatura de Madrid a los Juegos Olímpicos del 2012. Además, dijo el presidente de SEPI, "queremos recorrer ese gran techo de potencialidad" que supone la industria del caballo, desde los 600 ó 650 puestos directos de trabajo en el hipódromo, que serán más de 2.000 inducidos, a la recuperación de oficios y actividades profesionales ligadas a la hípica.

Para Fernández-Villaverde, además de la importancia de la inversión inicial -que tranquilizaba a Patrimonio tras las experiencias fallidas de dos concursos públicos en los que el ganador del primero se retiró y el segundo, quedó desierto- la entrada de SEPI y LAE supone la resolución de "un viejo problema que viene del fracaso de la gestión de Sarasola, al que Patrimonio tuvo que echar", tras la celebración de varios juicios. Resuelve asimismo el asunto "básico" de las apuestas, que asume la LAE con la posibilidad de realizarlas dentro del hipódromo y también externas, y "el paso del tiempo" despejará si se ha podido recuperar a "afición hípica durmiente", tras los años de inactividad total, dijo el presidente de Patrimonio Nacional.

Temas

En Sociedad

    0
    comentarios

    Servicios

    • Radarbot
    • Libro
    • Curso
    • Inversión