El motivo de tan insólita condena es que el niño al que vendió el animal tenía 14 años y en el Reino Unido constituye un delito vender animales a menores de 16.
Lo más escandaloso es que la mujer fue víctima de una trampa tendida por el propio Ayuntamiento, que envió al muchacho para ver si la dueña de la pequeña tienda de animales, cumplía la prohibición oficial de vender animales a menores.
De esta noticia informan varios diarios británicos, que dan cuenta de que Joan Higgins, de 66 años de edad, a partir de ahora tendrá antecedentes penales, y su hijo también. Trabajaba con ella en la tienda y ha sido condenado a 120 horas de servicios comunitarios.
Higgins vendió supuestamente el pez de colores al niño de 14 años sin preguntarle la edad y tampoco le aconsejó sobre cómo cuidarlo. Al cometer el delito, fue necesario abrir un proceso judicial contra ella y su hijo. Ambas detenciones y procesos judiciales han supuesto un coste de 22.473 euros al Estado.
La condenada está traumatizada por lo sucedido: "¿Tan peligrosa soy que tengo que llevar una pulsera telemática? Estas pulseras son para la gente que hace cosas malas por la noche", agregó.
Condenan a una mujer por vender un pez a un niño
Por vender un pez de colores, Joan Higgins ya tiene antecedentes penales. Pagará una multa de casi 1.200 euros, llevará una pulsera telemática y no podrá salir de casa durante 7 semanas, de siete de la tarde a siete de la mañana.
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