
Doce horas en el ala de un avión es lo que han tenido que aguantar para sobrevivir un padre y sus dos hijas después de estrellarse el aparato en el que volaban y quedar parcialmente sumergido en un lago helado de Alaska. Gracias a un piloto amateur, Terry Godes —que vio una publicación en la red social Facebook— junto a una decena de pilotos pudieron encontrar el avión siniestrado en el lago Tustumena.
Recordemos que la avioneta Piper PA-12 Super Cruiser se dio como desaparecida el domingo cerca de las 22.30 horas tras no volver a la hora prevista. El aparato en cuestión hacía turismo desde Soldotna hasta el lago Skilak en la península de Kenai. En esa zona, los supervivientes tuvieron que aguantar varias horas con temperaturas bajo cero durante la noche según los informes meteorológicos del día.
Una vez rescatados, los tres fueron trasladados a un hospital con heridas que no se consideraban potencialmente mortales, dijeron los agentes de la Policía estatal de Alaska.
¿Cómo fue posible el rescate? Pues por una serie de milagros en serie, el primero que no se hundiera el avión, luego que pudieran estar sobre el ala tantas horas y, por supuesto, sobrevivir a las temperaturas bajo cero de la noche. Recordemos que Alaska tiene pocas carreteras, lo que obliga a muchas comunidades a depender de pequeños aviones para desplazarse.

