
La muerte de las dos amigas adolescentes encontradas sin vida por el padre de una de ellas en el Parque de la Concordia de Jaén, se contempla como un suicidio pactado. La Brigada Judicial de la Policía Nacional ha indicado que en la primera inspección ocular no se apreciaron signos de violencia y por tanto no hay elementos que apunten a la participación directa de terceras personas. No obstante, advierten, la investigación sigue abierta.
Aunque no han trascendido muchos detalles sobre el caso, que está bajo secreto de sumario, hemos podido saber que los investigadores intentan determinar si una de las jóvenes indujo al suicidio a la otra. En estos momentos, la policía está realizando un análisis exhaustivo de los teléfonos y también de los últimos movimientos que realizaron las menores —Rosmed, de 15 años, y Sharif, de 16—.
Algunos de ellos hacen pensar al entorno de las chicas, españolas de origen colombiano, que pudo pasar algo más. La madre de Sharif no cree que la muerte de su hija fuese un suicidio. Según ha explicado este lunes en declaraciones a Telecinco, la menor nunca sufrió acoso escolar —como han asegurado algunos de sus amigos—. "Era una niña extremadamente feliz, demasiado noble y responsable con sus cosas", ha aseverado.
Los últimos mensajes
La mujer rechaza la posibilidad de que Sharif quisiera morir. Entre otros motivos por los últimos mensajes enviados por las chicas antes de perder la vida, alrededor de las diez de la noche. Habló con ella por última vez sobre las nueve de la noche y no le notó nada extraño. Rosmed —ha relatado— le escribió a su hija a las 21.41 horas para agradecerle su amistad y "despidiéndose de ella". Algo que no le cuadra "si estaban juntas", exclama.
Cinco minutos más tarde es Sharif quien le escribe a su novio para decirle que tienen que dejar la relación porque es "lo mejor para los dos". La madre de la menor asegura que "no es la forma de escribir" de su hija. Cree que esa noche pasó algo más. Y confía en que la autopsia y la investigación policial revele lo que ocurrió en realidad. Ella piensa que pudieron drogarlas y su muerte fue un homicidio.
¿Fue un homicidio?
En la misma línea, el padre de Sharif ha indicado en 'El programa de AR' que la menor "estaba pasando por su mejor momento, estudiando peluquería y estética que era lo que más le gustaba". Según ha explicado, su hija estaba feliz y no tenía problema en el centro. De hecho, "ayudaba a otros niños" porque esa era su condición.
"Yo estoy convencido de que esto es un homicidio disfrazado" y "hay terceras personas implicadas", ha aseverado. Por lo que ha argumentado, Rosmed era "una niña depresiva" que había tenido ese tipo de problemas en el instituto anterior. Pero no era el caso de Sharif, a la que sus amigos buscaban en busca de consejo. "Hubiera luchado, se hubiera agarrado a la rama".
La hipótesis del bullying
A pesar de que la familia de Sharif niega el bullying en el caso de su hija, algunos de los amigos de las menores fallecidas han señalado que ambas habían sufrido acoso escolar en el pasado —en el instituto anterior, El Valle— y que esto podría haber desencadenado el fatal desenlace.
Por su parte, el Instituto San Juan Bosco de Jaén —en el que estudiaban las chicas antes de su muerte— ha descartado que las fallecidas sufrieran bullying. Según la información facilitada, una de ellas —Rosmed, de 15 años— dejó el centro en el mes de septiembre.


