
Mohamed Alí ha sido coronado Rey del boxeo por el Consejo Mundial (CMB) en una ceremonia que abrió la Convención del organismo en Cancún (México). La coronación de Alí estuvo a cargo del campeón de los pesos pesados, el ucraniano Vitaly Klitschko; del triple excampeón mexicano Julio César Chávez; el campeón súper welter, Saúl Canelo Álvarez; y del campeón diamante de los pesos medianos, el argentino Sergio Maravilla Martínez.
Klitschko colocó en la cabeza de Alí la corona de dos kilos de peso bañada en oro y destellos rojos con la leyenda Mohammad King, Chávez y Álvarez lo vistieron con una bata rojo de gran lujo y Maravilla le ciñó su propio cinto diamante valorado en 60.000 dólares. Los detalles de la corona mostrarán cuatro puntas que sostienen el mundo y estará adornada con joyas de color amarillo, negro, blanco y rojo.
Alí entró en el escenario, una pequeña arena de boxeo para unas 1.500 personas en Cancún, a paso lento acompañado por su esposa y una ayudante personal y la mayor parte de la ceremonia permaneció sentado en su trono, antes y después de recibir el homenaje.
El excampeón, que el pasado 17 de enero cumplió 70 años, denotaba los efectos del Parkinson, aunque con mucho control de sus movimientos y durante algunos momentos levantó la mano derecha y sus acompañantes le retiraron los anteojos oscuros para saludar a los presentes. A sus pies, medio centenar de peleadores entre activos y retirados procedentes de varios países, aunque en la mayoría fue de mexicanos que en algún momento defendieron algún título.
El presidente del CMB, el mexicano José Sulaimán, y el gobernador del estado de Quintana Roo, Roberto Borge, estuvieron entre los protagonistas de la ceremonia, que presentó bailables típicos mexicanos y un coro de niños mayas que interpretó el tema We are the World. Sulaimán destacó que Mohamed Alí era y será "el héroe" de su vida y relató a los presentes pasajes de sus encuentros personales, además de que el CMB presentó un vídeo con detalles de sus combates y de su personalidad.
El CMB se reunirá hasta el 8 de diciembre para revisar los planes de la Copa del Mundo de pugilismo aficionado y el tema de la reelección del presidente José Sulaimán, que no ha hecho público si continuará o dejará el cargo que detenta desde 1975.
Durante la convención, el organismo le hará un homenaje póstumo al boxeador puertorriqueño Héctor Macho Camacho, fallecido recientemente en su país a causa de las heridas de bala que recibió en un tiroteo.
