El Partido Popular hace malabarismos a fin de que su presencia en la próxima manifestación de víctimas del terrorismo no parezca un ataque a la política del Ejecutivo socialista, inmerso (según algunos de sus dirigentes, como Jaime Mayor Oreja) en una negociación con ETA.
Oficialmente, sin embargo, el PP sigue mostrando su apoyo al Gobierno en este sentido, y por ello quiere alejar el fantasma de que la marcha es "contra" Rodríguez Zapatero, sino que obedece a una medida de presión con el objetivo de que Batasuna, a través de la marca Sortu, no se cuele en las elecciones de mayo.
Una estrategia que enfadaba sobremanera a las víctimas, que este domingo tuvieron que escuchar como Antonio Basagoiti afirmaba que era una protesta "de apoyo al Gobierno". En declaraciones a esRadio, el jefe del PP vasco se vio en la obligación de rectificar.
La secretaria general de la formación, María Dolores de Cospedal, también se ha visto en aprietos para defender la presencia del PP en la manifestación sin que ello supusiera desautorizar a Basagoiti: "Es para decir que ETA no puede estar en las instituciones", afirmó.
¿Pero cree que es una advertencia al Gobierno o en defensa del Gobierno?, se le abordó. Cospedal insistió: "Es para evitar de todas las maneras posibles que Batasuna y el mudo de Batasuna concurran a las elecciones".
En este sentido, la número dos ahondó en la idea de que el PP "ha demostrado ante todos los españoles que ha sido el garante de que no se pueda negociar con ETA y que ETA no esté en las instituciones".
Lo que no aclaró fue quien formará parte de la delegación popular, de la que ya se descolgó Soraya Sáenz de Santamaría la pasada semana. Tampoco se espera que esté Mariano Rajoy, habida cuenta de que no ha secundado ninguna manifestación en la presente legislatura.