Menú
Amando de Miguel

De letras y números

Don Toni confirma lo que ya sabíamos, que en su tierra de origen el mallorquín se pierde por culpa del catalán. Con su pan y sobrasada se lo coman.

Antonio Fernando (Toledo) apunta algunas deformaciones del lenguaje cuando se refieren a números:

  • cuarenta y un pesetas (en lugar de "cuarenta y una pesetas")
  • ganó de cinco (en lugar de "ganó por cinco")
  • dividido de dos (en lugar de "dividido por dos").

¿Esas cosas no se enseñan en la escuela?

Eduardo Aranda (Roma) me aclara el misterio de los números y letras que llevan los lápices. "La letra H es el factor de dureza. El factor B indica la blandura de la mina. Lo normal es HB, ni duro ni blando". Entiendo, pues, que 2H es "muy duro" y 2B "muy blando". Pregunto, ¿no sería mejor una escala decimal de dureza? En ese caso iría desde el 0 (el más blando) a 10 (el más duro). Ya de paso, hago otra consulta a quien pueda resolverla. Mi frigorífico tiene una escala de frío en grados: 2, 3, 4, 5. Pregunto, ¿cuál es el polo más frío y el menos frío? ¿Los grados 2, 3, 4, 5 son bajo cero o sobre cero? ¿Por qué el dichoso frigo no aclara algo tan elemental?

José María Navia-Osorio oyó ayer esta deliciosa frase: "La situación dio un giro de 380 grados". Comenta: "En realidad es girar 20 grados después de dar una vuelta completa". Ya es capricho.

Julia y Javier Vázquez-Dodero Fontes (Murcia), comentan:

Trasteando el diccionario de la Real Academia con mi hermana hemos empezado a buscar nombres de períodos anuales de progresiva duración encontrándonos con la sorpresa de que entre el septenio y el decenio hay un vacío que en mi condición de coleccionista enfermizo resulta intolerable.

No hay por qué desesperar. El octeto es un conjunto de ocho instrumentos musicales o una secuencia de ocho dígitos. En un ensayo biográfico me he atrevido a hablar del "octeto de Aznar" por los ocho años que estuvo en el Gobierno y que fijó de antemano. También podríamos inventar lo de octenio. Por lo mismo, cabría hablar de eneanio. Suena raro, pero tenemos eneágono (= nueve lados) o eneasílabo (= nueve sílabas).

Juan Llamas (Oviedo) plantea una cuestión que no tiene fácil respuesta en los diccionarios: qué es una escuadra y qué es un cartabón. Su razonamiento es apasionado y convincente:

Los diccionarios no dejan claro cuál es cuál. Yo estudié con una eminencia de la Geometría, don Fernando Nagore, que nos "provocaba" llamando escuadra al de ángulos 30-60-90 y cartabón al de 45-45-90, sabiendo que nos habían enseñado en el colegio lo contrario. Hoy en día los libros de texto siguen diciendo lo contrario. Creo que nuestro catedrático tenía razón, pero los "errores" de algún iluminado se han acabado de imponer, y me explico: he consultado diccionarios y en internet, donde hay debates sobre este tema. Las opiniones coincidentes con mi catedrático son explicadas prolijamente, y –como sucede con muchas cosas en la vida– la opinión contraria es defendida con mucha virulencia, pero sin explicaciones. Parece que aquel que no puede defender y explicar sus ideas o creencias los defiende con violencia, ya que se atacan más sus creencias que sus ideas.

He encontrado una opinión de un internauta (que por cierto, también estudió con don Fernando Nagore) con la cual coincido plenamente: "escuadras son las dos pues ambas tienen un ángulo de 90º pero sólo la de 45/45/90 es cartabón, y el origen de la palabra, según a mi me explicó mi profesor de geometría de la escuela de arquitectura, don Fernando Nagore, una eminencia, proviene de quarto buono que efectivamente es el cuarto de circunferencia, y, uniendo sus extremos obtenemos la escuadra de 45/45/90 o cartabón. También se que según alguna enciclopedia el origen de la palabra cartabón es diferente, pero también coinciden en que el cartabón es la de 45/45/90.

El Vocabulario científico y técnico de la Real Academia de Ciencias define la escuadra como la "plantilla... en forma de triángulo rectángulo isósceles" (dos lados iguales). El cartabón es la "plantilla... en forma de triángulo escaleno" (los tres lados desiguales). Creo que es mejor la definición por los ángulos.

Toni Amengual (mallorquín residente en Zaragoza) se pregunta por qué, en los resultados de las quinielas, todo lo que no sea 1 (victoria del de casa) se considera una variante. Podrá parecer arbitrario, pero ese significado está recogido ya en el DRAE. Supongo que se parte de un modelo más probable en el que todos los partidos los ganen los equipos propietarios del campo. Luego todas las demás combinaciones son "variantes". Ya de paso, don Toni confirma lo que ya sabíamos, que en su tierra de origen el mallorquín se pierde por culpa del catalán. Con su pan y sobrasada se lo coman.

En Sociedad

    0
    comentarios