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Ignacio Villa

Otra mentira-Moratinos

Moratinos tendrá que explicar los motivos por los que ha ocultado a la opinión pública española esta nueva avería de un submarino nuclear británico

La aparición de un nuevo submarino nuclear británico en Gibraltar para ser reparado coloca al actual Gobierno ante su verdadera realidad. La política asamblearia y de pancarta que Zapatero orquestó durante años desde la oposición le está pasando factura hasta el último céntimo. Y es que la crudeza de las hemerotecas y de las fonotecas dejan a Zapatero y a su Gobierno a los pies de un sonoro ridículo.
 
Como suenan aquellas condenas y críticas de los lideres socialistas señalando que el mundo se acababa de un día para otro sí el Tireless no abandonaba el Peñón. Las voces del propio Zapatero, Caldera, Blanco, Chaves o Marín tienen sonido de chirogota pocos años después, al esconderse –deprisa y corriendo– justo en el momento de la aparición del submarino en el horizonte político español.
 
Con el Tireless, el entonces secretario general del PSOE dijo que había mandado una carta al primer ministro británico Blair para pedirle la retirada inmediata del submarino. ¿Lo ha hecho ahora?. Ha sido tan zafia la política de oposición del PSOE que ahora afloran todas sus limitaciones, que, por lo que estamos viendo, son muchas.
 
Estos viejos testimonios lo que nos demuestran es la poca categoría política del actual Gobierno. Incapaz de hacer las cosas con seriedad en la oposición les inhabilita para actuar con responsabilidad en el Gobierno. De todas formas, lo más grave que ha ocurrido en torno a lo del submarino ha sido la nueva mentira del ministro Moratinos.
 
El titular de Exteriores ha reconocido que conocía la posibilidad de esa llegada desde hacía una semana. ¿Cuáles son las razones por las que no ha dicho nada? Moratinos tendrá que explicar los motivos por los que ha ocultado a la opinión pública española esta nueva avería de un submarino nuclear británico.

Moratinos vuelve a columpiarse con otra mentira. Y ya hemos perdido la cuenta. Y, ojo, ha prometido que en una semana deberá estar reparado. Por el momento seguiremos escuchando los sonidos del pasado. Son el verdadero termómetro de este Gobierno.

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