Las organizaciones criminales no dudan en adaptar las últimas tecnologías que llegan al mercado en beneficio de sus actividades ilícitas. Un buen ejemplo de ello es la operación que ha llevado a cabo en los últimas semanas la Policía Nacional, que se ha saldado con la captura en Málaga de un avión no tripulado o dron que había sido modificado para poder trasladar cargamentos de droga desde Marruecos hasta la costa española.
La aeronave, definida por los agentes como de tipo "profesional", tiene una envergadura de 4,3 metros —es la distancia entre el extremo de una ala y el extremo de la opuesta— y cuenta con una autonomía de vuelo de hasta siete horas. En el caparazón principal tenía un compartimento que se abría hacia arriba en el que este grupo metía los paquetes de hachis o marihuana que enviaba de un lado a otro del estrecho.
La investigación para desarticular este grupo dedicado al tráfico de drogas comenzó a principios de este año, cuando los policías tuvieron conocimiento de la existencia de un grupo mafioso, asentado en la costa malagueña y compuesto por varios francomarroquíes, que se dedicaban a llevar droga a Francia, bien por el método Go Fast –a bordo de vehículos sustraídos–, bien a través de paquetería mediante la ocultación de la droga entre mercancía legal.
Las pesquisas permitieron ubicar a uno de los principales investigados en una apartada villa rural de Almáchar (Málaga), utilizada como guardería, donde se ocultaba el hachís y la marihuana hasta su exportación hasta el país galo. Los enlaces policiales internacionales permitieron conocer entonces que el mismo grupo también estaba siendo investigado por la policía francesa, exactamente la parte de la estructura dedicada a la recepción de la mercancía y su posterior venta al por menor.
Fue a partir de ese momento cuando comenzó la colaboración entre los cuerpos policiales de ambos países. Los agentes españoles comenzaron a investigar las estructuras del grupo criminal en la provincia de Málaga mientras sus homólogos franceses hacían lo propio en su territorio. Fruto del trabajo de ambos cuerpos se logró constatar que la organización contaba con un dron profesional de grandes dimensiones, acondicionado para trasladar la droga desde Marruecos a España.
Los agentes franceses realizaron entonces la detención de tres miembros de la organización en Francia, incautándose de 12 kilogramos de hachís dispuestos para la distribución al por menor. De forma paralela, solicitaron una Orden Europea de Detención para que el principal investigado en España, que residía en Almáchar fuera arrestado y extraditado a Francia. Fue en el registro del domicilio en el que fue detenido en el que se encontró el dron, además de útiles relacionados con la manipulación, preparación y envío de estupefacientes.