Con su "proceso de escucha" aún por empezar -arrancará el 8 de julio- la vicepresidenta del Gobierno Yolanda Díaz suma un nuevo varapalo político con el resultado que ha obtenido la extrema izquierda en Andalucía
Por Andalucía, la coalición que agrupa a Izquierda Unida, Andalucía-Más País, Andalucía-Verdes Equo e Iniciativa del Pueblo Andaluz, más Unidas Podemos por Andalucía y Alianza Verde, obtiene sólo cinco escaños, uno menos que los seis partidos detrás de la candidatura. Mientras, Adelante Andalucía, el partido de Teresa Rodríguez, lograría dos. Son también menos diputados que los partidos detrás de la marca, que suma a Adelante Andalucía, Anticapitalistas, Izquierda Andalucista y Primavera Andaluza.
En conjunto, es un resultado pírrico para los partidos a la izquierda del PSOE. En las anteriores elecciones, la coalición que se presentó a los comicios, Adelante Andalucía, sumó 17. Si se comparan los votos, en estos comicios han logrado un total de 427.000 votos, muy lejos de los 600.000 que obtuvieron en las anteriores elecciones Adelante Andalucía y Equo.
Aunque previsiblemente Díaz intentará desmarcarse de estos resultados, como intentó hacer en Castilla y León, la vicepresidenta sí participó en la campaña junto a Ione Belarra, Enrique Santiago o Íñigo Errejón, entre otros. Desde la coalición se destacó que habían sido los mítines más multitudinarios.
En concreto, Díaz participó en tres mítines, en Dos Hermanas, Málaga y en Córdoba, donde empleó su tono más mitinero pidiendo votar "en nombre de los represaliados franquistas". Entre los simpatizantes la recibieron al grito de "presidenta".