Carlos Cuesta, desde Expolevante descubre de la mano del alcalde de Níjar, José Francisco Garrido Requena, el papel de la agricultura almeriense como motor socio económico del municipio y de toda la comarca levantina. 6.000 hectáreas de cultivos hortofrutícolas con un modelo intensivo de precisión, bajo cubierta en innovadores invernaderos solares, con las mínimas huellas de carbono e hídrica que ofrecen alimentos de primera calidad y con garantía de seguridad alimentaria.
Francisco Martin, de Agro San Isidro, y Paco de Ves, de Coproníjar, insistieron en que la híper regulación del campo lastra la competitividad de las empresas hortofrutícolas que, pese a garantizar el mayor estándar ambiental y de seguridad alimentaria del mundo. Esto supone un riesgo de deslocalización de las producciones nacionales hacia terceros países con una mano de obra más barata y un modelo de producción poco respetuoso con el planeta y con la salud de los consumidores.