En la noche de los viernes la 2, de TVE emite el programa "Historia de nuestro cine", que presenta Elena Sánchez y mantiene un coloquio con profesionales, con mesura, sosiego, sin interrumpirlos jamás. Cumple a la perfección su labor y mantiene ante la audiencia un rostro agradable, atractivo, desde 2015. Discreta en su vida privada, sin que se le conociera otra relación sentimental hasta que se supo su vinculación amorosa con el matador de toros Roberto Domínguez. Diez años duró hasta que pudieron casarse. Si no lo hicieron antes, quizás fuera porque el diestro vallisoletano estaba pendiente de su divorcio con su anterior esposa, Maite, con quien tuvo dos hijos, Victoria, nacida en 2001 y Roberto, en 2003. Su segunda boda fue en la intimidad, en el verano de 2023, para más tarde, en octubre, celebrarla en una fiesta a la que invitaron a doscientos comensales, hace de esto, por tanto, un año. Una pareja que no suele exhibirse en acontecimientos sociales, salvo los justos, ni tampoco aparece en las revistas rosas.
Una determinación del torero estos días va a significarles un cambio, a mejor, en su hogar. Y es que él ha dejado de apoderar al más taquillero de las figuras de los ruedos, el peruano Andrés Roca Rey, para no abordar más a partir de ahora relación profesional alguna con personajes de la fiesta brava. Eso cambiará la vida diaria de Roberto Domínguez para estar más tiempo con Elena, su encantadora esposa.
Nacido en Valladolid hace setenta y cuatro años Roberto se hizo torero a la vera de su tío, Fernando Domínguez, veterana leyenda de los ruedos. Tan cercano a él que cuando dejó de vestirse de luces el 12 de octubre de 1992, tras una carrera notable, sobre todo en sus últimas temporadas, quiso anunciarse por última vez en los carteles en un festival celebrado en 1999 en homenaje al hermano de su padre.
La actividad que luego emprendió Roberto fue la de apoderado de Julián López "El Juli", durante once años. Luego tuvo el mismo cometido con Roca Rey, ahora roto a los cuatro años de relación. ¿Por qué ha tomado esa decisión? Un documental sobre Roca, quizás tenga algo que ver con tal motivo. Aun así, convengamos en que Domínguez estaba cansado de viajar tantos días al año, acompañando a sus representados cada tarde que toreaban, cuando no eligiendo corridas por las ganaderías de su predilección. Eso significaba que estaba poco tiempo junto a su mujer.
Roberto y Elena se conocieron en el transcurso de una entrevista que ella le hizo. Presentaba "Tendido Cero" y también en otra temporada "Canal Toros" de Vía Digital. En ese ambiente taurino se enamoraron. Pero ya quedó dicho que Roberto tenía pendiente su divorcio y no podía comprometerse del todo con Elena.
Elena Sánchez Sánchez nació en Toledo en 1979 pero se crio en Gavilanes, Ávila, la ciudad natal de su padre. Licenciada en Ciencias de la Información, amén de los programas mencionados, también sustituyó un tiempo a Ana Igartiburu en "Corazón", y a Concha Velasco durante su ausencia en "Cine de barrio", además de presentar algunos festivales. Muy segura siempre ante las cámaras. La vida tan viajera de Roberto, les impedía estar más tiempo juntos de lo que deseaban. Es veintiocho años más joven que él.
En sus desplazamientos invernales a Hispanoamérica, el torero mantuvo, antes de conocer a Elena, varios romances, uno con cierta Miss Mundo, en Lima, y otro con la presentadora colombiana Jeanette Rodríguez.
En 1986 se retiró momentáneamente de los ruedos. Pasó seis meses en Londres. Culto, con estudios de Arquitectura, aprovechó ese tiempo para aprender inglés. Conoció allí a Carmen Posadas, escritora uruguaya, que había estado casada con el gobernador del Banco de España Mariano Rubio, implicado en un feo asunto, el caso Ibercorp, que lo llevó a la cárcel. Entre Roberto y Carmen se suscitó una mutua simpatía, que en las revistas del corazón se tradujo como enamoramiento. Ambos negaron tener relaciones íntimas. Breve fue más adelante su encuentro con Ana Obregón que fascinada por el triunfo de Roberto una tarde en Aranjuez, lo celebró a su lado en la intimidad.
Reapareció Domínguez en 1988 y en las cuatro temporadas siguientes fue cuando pudo demostrar su arte y su técnica ante los toros. Fue en la Monumental madrileña, también en la sevillana Maestranza, donde brilló principalmente. La temporada de 1990 fue cumbre. Como artífice menor más eficaz como pocos se recuerda su acierto con el verduguillo, la suerte del descabello que tantas orejas han perdido muchos de sus colegas, por su impericia. En documentada biografía del diestro, escrita por Santos García Catalán, Roberto a secas, está contada muy explícita, toda su carrera.
Hombre cauto con la palabra como buen castellano, pero vehemente a la hora de negociar ganadería y festejos con los empresarios. Deportista, que ha practicado motociclismo, equitación, "squash", submarinismo… Hasta apareció como actor en un capítulo de la serie "Curro Jiménez". El mentado García Catalán apuntaba que Roberto estuvo a punto de protagonizar una película con Giannina Facio (una de las amantes de Julio Iglesias) y Ryan O´Neal (el galán de "Love Story"), pero a la que renunció porque el argumento le parecía demasiado escabroso.
Como ya dijimos que hizo algún curso de Arquitectura, se le suponía aptitudes para el dibujo, que aprovechó para diseñar algunos de sus trajes de luces, con rombos y figuras geométricas, en vez de los clásicos adornos de las sastrerías taurinas.
Parte de lo mucho ganado con su profesión, Roberto lo invirtió en una ganadería, Valdeterrazo. Y aunque haya comunicado hace pocos días su decisión de apartarse de todo cuanto tenga que ver con los toros, no creemos eso le impida mantener su afición de toda una vida. Quien desde luego debe estar más que satisfecha es Elena Sánchez, al tenerlo más cerca y asiduamente que antes.