Los fogones de Top Chef se encendieron hasta el máximo en su edición del lunes. La de esta semana, que giraba en torno a recetas con un elemento tan simple como el huevo, fue una de las más ajustadas que se recuerdan en el espacio de Antena 3. Entre otras cosas, Fran tuvo que abandonar el programa al ceder ante el empuje de su compañera Inés.
En esta primera prueba concebida en torno al huevo, David se alzó con el brazalete de inmune, tal y como informó el juez Alberto Chicote. Pero en esta ocasión el principal enemigo fue el tiempo. Los concursantes tan solo contaron con 30 minutos para realizar su plato, un tiempo que le resultó insuficiente a algunos de los concursantes, como a Víctor, que no logró acabar su receta, por lo que el jurado finalmente no probó su plato.
Carlos, el participante más problemático de todo el talent show, aprovecha el momento para malmeter contra David, uno de sus compañeros, acusándole de imitar los platos de otros cocineros famosos. "David es un copión macho, porque acaba de imitar a Nandu Jubany en un plato. Ha hecho el mismo, y eso tampoco mola ¿no?", le susurró a su compañero de prueba, Víctor.
La segunda prueba fue igualmente dura, ya que los concursantes tuvieron que realizar sus recetas más originales para sorprender a sus propios compañeros. Los otros participantes se convirtieron en el más duro jurado. En esta prueba se pusieron de manifiesto las rencillas entre los concursantes, la mayoría ya conocidas y anunciadas por ellos mismos. Carlos volvió a insistir en que Marc es el que debe abandonar el concurso, pero una semana más, su "enemigo" consiguió salvarse de la quema.
A la hora de juzgar los platos de sus compañeros, Marc, Peña y Carlos fueron los más críticos con los platos de cada uno. "Me encanta la salsa de maíz, está muy buena, pero ahí me quedo. No he encontrado ningún otro sabor más", opinó Carlos, eso sí, con toda la boca llena de comida. Peña, con cara de asco, aclara que a él "no le ha gustado nada".
Marc también tuvo que valorar el plato de Peña y Carlos, algo que "ralla" al broncas del concurso, porque no sabe aceptar una crítica, aunque Marc solo dijo que no le gusta "como había resulto el plato", pero que el saber sí. Lo que pasa es que Carlos "se siente impotente" al no poder contestar a las críticas de sus compañeros.
Finalmente el que no logró continuar en Top Chef fue Fran, que realizó un Bloody Mary que no convenció al jurado. El Mojito que preparó Inés logró que ésta siguiera en el programa, aunque ella misma ni siquiera lo creía: "Me han venido a visitar los ángeles, incluso mi padre".