Menú
Katy Mikhailova

Chochete y la decadencia

Detrás de la refinada marca Chochete está Soraya Arnelas, que ha decidido jugar a diseñar y vender.

Detrás de la refinada marca Chochete está Soraya Arnelas, que ha decidido jugar a diseñar y vender.
Soraya Arnelas. | Cordon Press

Lo de que cada famoso de turno sea diseñador me parece cada vez más divertido. Por no decir, curioso. O directamente: patético.

Cualquiera puede encargar unas sudaderas o camisetas, hacer un pegote de su firma o marca, y lanzarla por alguna plataforma en el mejor de los casos (cuando no es por encargo vía email).

Hoy cualquier ser puede convertirse en diseñador. Se nos olvida que para diseñar se suele tener cierta formación, cierta información de confección-tejidos-corrientes, y hasta cierto ‘buen gusto’. Esto último, bastante sobrevalorado. Bastante prostituido. Con ese “cierto”, “algo”, “una pizca de…” ¿talento?, ¿gracia natural?, ¿intuición?, ¿ética-estética? Uno puede ser (al menos) aspirante a diseñador.

Pero este no es el caso que vengo a contarles. Chochete va en otra onda. Detrás de la refinada marca, una ex triunfita, que, al no haber conseguido convertirse en la nueva Rosalía, ha decidido jugar a diseñar y vender.

Hoy, desgraciadamente, todo vale. Vivimos una era del “todo-valismo”: vales, lo que quieres valer; cuestas, el precio que te pongas. Una cosa es el liberalismo ético, y otra es el libertinaje estético. La moda se ha prostituido hasta tal punto, que bazofias como Chochete hacen que Zara sea arte.

Lo siento, Soraya: no todo merece la pena. Esta marca es soez a la par de polémica. Una vez más, en la línea de Gucci (pero en versión low cost y sin ninguna profundidad emocional), la polémica justifica el medio y el fin. Darse a conocer a cualquier precio. Porque de llamarse ‘Je Suis Soraya’, ‘#SorayaSomosTodos’ , o ‘Fashion Sorayistas’, no interesaba a nadie, más que al club de fans de la ‘cantanta’.

Hasta La Pollería de Chueca tiene rollo. Hacen gofres en forma de miembros viriles, y ahora han abierto La Chochería (mi corrector, me insinúa corregir y poner ‘chuchería’). Pollería y Chocheria tienen su cierto sentido, polémico, pero ¡qué ricos están esos dulces, salvando las formas, y nunca mejor dicho..! 

Lo de las sudaderas aburridas con ‘Chochete’ en medio, me parece basto, soso, nada original y absurdo. Casi un coño pintado hubiera sido más interesante. Ya saben que mi querida Carmen Lomana es más de decir ‘coño que jolines’. Lo siento, Soraya, de nuevo: así no.

Temas

En Chic

    0
    comentarios