
Despertarse y que la boca huela mal es algo que le sucede a muchas personas, se llama halitosis o mal aliento y puede ser causado por diferentes motivos, la mayoría leves, pero también por algunos más complicados. Pero, ¿Por qué sucede? ¿Por qué las mañanas saben así? La respuesta se trata de las bacterias de la boca. Durante la noche, los microorganismos naturales de la boca viven, comen, se reproducen y, finalmente, mueren. Estas bacterias viven en las hendiduras de las encías, en la lengua y dentro de cualquier otro rincón o grieta que puedan encontrar en la boca. Y, a medida que descomponen sustancias naturales como los restos de alimentos, las células, la saliva y la sangre, liberan compuestos volátiles de azufre y otros subproductos conocidos por su aroma no tan agradable.
Por todo ello, hay que saber que le pasa a la mayoría de las personas pero, cuando sucede, hablar con alguien que tiene mal aliento es una experiencia desagradable y perturbadora. La incomodidad aumenta con cada palabra pronunciada, y se buscan formas de evitar el aliento nauseabundo que emana de la persona. A menudo, uno se siente atrapado en una situación incómoda, tratando de mantener la compostura mientras lucha por soportar el olor desagradable que emana de su interlocutor. Pero, ¿Por qué se tiene mal aliento por las mañanas? El mal aliento matutino, o halitosis, es una condición común que experimenta la mayoría de las personas en algún momento. Se debe a una combinación de factores que se exacerban durante la noche.
Lo que esta claro es que, durante el día, la saliva desempeña un papel crucial en la limpieza de la boca, neutralizando ácidos producidos por bacterias y lavando células muertas que se acumulan en las encías, la lengua y las mejillas. Sin embargo, la producción de saliva disminuye significativamente durante el sueño, lo que crea el ambiente perfecto para que las bacterias se multipliquen. Estas bacterias descomponen las partículas de comida y células muertas, liberando compuestos sulfurados volátiles que son los principales responsables del mal olor.
Otro factor que contribuye al mal aliento por la mañana es la respiración por la boca, que puede aumentar la sequedad oral y reducir aún más la saliva disponible para limpiar la boca. Además, ciertos medicamentos, el tabaquismo, y condiciones como la enfermedad periodontal o reflujo gastroesofágico, pueden agravar el problema.
Motivos de la halitosis
- Uno de los motivos es la sequedad bucal: La boca seca puede deberse a un flujo reducido de saliva. La saliva ayuda a neutralizar los ácidos y las bacterias y a mantener un pH saludable. El motivo entonces es que, si se tiene menos saliva o si no hace su trabajo, las bacterias pueden multiplicarse y producir compuestos con mal olor.
- Otro motivo es la alimentación. Ciertos productos como el ajo y la cebolla contienen sustancias químicas que afectan el aliento y la piel. Además, los productos lácteos, una causa menos conocida del mal aliento, alimentan las bacterias naturales de la lengua que producen malos olores.
- Mala higiene dental, lo que provoca acumulación de placa, persistencia de partículas de comida entre los dientes y saburra de la lengua que esencialmente cambia el entorno bacteriano de la boca. Esto favorece el crecimiento excesivo de bacterias, que de otro modo serían neutralizadas y que pueden provocar mal aliento.
- Enfermedad de las encías también provoca mal aliento. Cuando uno no se cepilla bien los dientes, se acumula placa. No eliminar esta placa con el cepillado y el uso de hilo dental puede hacer que vaya por debajo de la línea de las encías y provoque infecciones, lo que no solo daña la estructura de los dientes sino que también provoca mal aliento debido a las bacterias involucradas.
- Heridas quirúrgicas, las caries, las enfermedades de las encías o las llagas en la boca pueden causar mal aliento. Estas condiciones crean lugares adicionales para que las bacterias se escondan y aumenten.
- Otras afecciones, como cálculos en las amígdalas, infecciones o goteo posnasal constante, pueden empeorar significativamente el mal aliento. Las bacterias que cubren los cálculos de las amígdalas y el líquido del goteo posnasal son ricas en compuestos que causan el mal olor.
- También algunas enfermedades lo provocan. Enfermedades como el cáncer de pulmón o de estómago u otras afecciones graves como los trastornos metabólicos pueden provocar olores distintivos en el aliento. La acidez de estómago regular, a menudo un signo de enfermedad por reflujo ácido, también puede contribuir a la halitosis.
¿Cómo saber si el mal aliento proviene del estómago?
El aliento con olor a sulfuro, similar al de huevos podridos, podría estar relacionado con problemas gastrointestinales como la gastritis, reflujo ácido o úlceras. Además del mal aliento, otros síntomas como acidez estomacal, dolor abdominal o regurgitación ácida podrían indicar que el origen del problema está en el tracto gastrointestinal.
La halitosis matinal, no patológica sino fisiológica
Existe una clase de halitosis no patológica y muy común, a tal punto que afecta a casi todo el mundo: la que se produce por las mañanas, al despertar. Es la llamada halitosis fisiológica, que no se produce como consecuencia de problemas de higiene o de hábitos de consumo, sino por la disminución del flujo de saliva en la cavidad oral durante el sueño. Tal disminución de la cantidad de saliva en la boca facilita el crecimiento incontrolado de bacterias gramnegativas y anaerobias, que producen un gas maloliente y putrefacción de ácidos con la posterior producción de productos sulfurados.
Como se debe a una baja producción de saliva, la halitosis fisiológica también puede producirse en otros casos de "boca seca", problema cuyo nombre técnico es xerostomía. Esto suele suceder, además de al dormir, tras situaciones en que una persona tiene que hablar durante mucho tiempo, por efecto secundario de medicación o por respiración nasal, apunta también este documento. La xerostomía crónica favorece las caries, infecciones, deshidratación y atrofia de las mucosas, y provoca acidificación de la saliva, que facilita el sobrecrecimiento bacteriano.
La importancia de tener una buena higiene bucal
Mantener una buena higiene bucal es fundamental para prevenir el mal aliento y promover una vida social y profesional saludable. El cepillado regular de dientes, el uso de hilo dental y enjuague bucal elimina los restos de comida y bacterias que causan el mal olor. Una boca limpia no solo reduce el riesgo de halitosis, sino que también previene enfermedades de las encías y caries. Además, una sonrisa fresca y libre de mal aliento aumenta la confianza en uno mismo y mejora las relaciones interpersonales. pero tampoco hay que olvidar visitar regularmente al dentista para chequeos y limpiezas profesionales que ayudarán a mantener la salud bucal en óptimas condiciones y a prevenir la halitosis.
Pero, además de todo eso, masticar adecuadamente los alimentos es fundamental para prevenir el mal aliento. El motivo es que, al masticar de manera completa y lenta, se estimula la producción de saliva, la cual ayuda a limpiar la boca y a neutralizar los ácidos que causan el mal olor. Además, masticar bien favorece la digestión adecuada y reduce la acumulación de residuos de comida en los dientes y encías. Por lo tanto, adoptar hábitos de masticación cuidadosos contribuye significativamente a mantener una boca fresca y saludable.
¿Cómo evitar el mal aliento por la mañana?
- Mantener una buena higiene bucodental
- Beber mucha agua
- Comer con frecuencia para producir saliva
- Evitar ciertos alimentos en la cena. No hay que comer alimentos fuertes o ácidos como ajos, cebolla, mariscos, pepinillos, etc. Su olor es muy fuerte y se notará al despertar.
- Acudir al dentista
¿Cómo tener buen aliento todo el día?
- Mantener una buena higiene bucodental.
- Cepillarse al menos durante dos minutos cada vez.
- No olvidar limpiar entre los dientes.
- Eliminar la placa bacteriana con colutorio.
- Comer con frecuencia.
- Tomar alimentos que estimulen la producción de saliva.
- Beber mucha agua.
- Reducir el consumo de alimentos con sabores fuertes.