
Con el calor del verano, una temida plaga resurge de las alcantarillas y sótanos: la Periplaneta americana, más conocida como la cucaracha americana. Este insecto, que puede alcanzar los 5 cm de longitud y es capaz de planear cortas distancias, ya se ha extendido por el 90% de las provincias españolas y se ha convertido en un problema creciente de salud pública.
A diferencia de la cucaracha común, la americana es más grande, más resistente y prolífica, lo que la convierte en una plaga especialmente difícil de erradicar. Además de transmitir bacterias, pueden contaminan los alimentos y provocar reacciones alérgicas, además de una profunda repulsión.
Según un estudio de los investigadores Carlos Pradera y Erik Rodríguez-García publicado por la Asociación española de Entomología, la cucaracha americana ya se ha extendido por el 90% de las provincias españolas. Los únicos lugares en los que no ha sido detectada, todavía, son Álava, Ávila, Soria, Teruel y Zamora.
"La cucaracha americana ha ido colonizando poco a poco nuestros sistemas de alcantarillado desde el último cuarto del siglo pasado, desplazando a la cucaracha negra (Blatta orientalis)", explican desde la empresa de control de plagas Arepla, con sede en Zaragoza. "Este año ha habido muchísima actividad de insectos y roedores en general, porque la primavera fue muy lluviosa y eso, junto al calor, favorece la multiplicación de estas plagas", aseguran desde la compañía.
¿Qué es la cucaracha americana?
La cucaracha americana no solo es más fértil, sino también más longeva. Vive casi el doble que la negra y, por si fuera poco, tiene alas: "Se mueve mucho más, corre más y tiene la capacidad de planear, lo que la hace más visible y difícil de controlar", añaden desde Arepla.
Además, tiene una mayor fecundidad y pone el doble de huevos que la negra: "En el mismo momento en que una ooteca –las cápsulas protectoras que produce la hembra para albergar sus huevos– eclosiona, las 16 crías ya comienzan a dispersarse y alimentarse solas", explican.
Una plaga peligrosa
Según los autores del informe, cuando la cucaracha americana llega a un municipio, genera un problema de plagas mucho más grave que otras especies como la cucaracha oriental. "El alcantarillado es el lugar ideal para la proliferación de esta especie, que alcanza poblaciones altas en lugares de clima templado como la costa mediterránea, y también es el reservorio para establecerse en lugares de clima frío, como el norte y el interior de la península ibérica".
Las ciudades actuales, con sus complejas redes de saneamiento, le dan a la Periplaneta americana un terreno perfecto para expandirse. Desde estos espacios oscuros y poco higiénicos, puede trepar hasta edificios y viviendas. Y lo preocupante no es solo su presencia: esta cucaracha es capaz de transportar microorganismos peligrosos —como bacterias, virus y parásitos— convirtiéndose así en un verdadero riesgo para la salud pública.
¿Cómo prevenir la aparición de cucarachas?
La empresa de control de plagas Arepla recomienda mantener bien cerrados los sistemas de alcantarillado e insisten en que "uno de los errores más comunes en viviendas es dejar desagües abiertos o sin sifón, lo que se convierte en una puerta de entrada directa para estos insectos". También recomiendan revisar sanitarios: "Con el tiempo, algunos inodoros ceden y se forman pequeñas grietas por las que pueden salir cucarachas desde el subsuelo".
Además, se recomienda evitar acumulación de residuos, buenas prácticas de higiene, mantener zonas húmedas bien ventiladas y revisar trasteros, garajes y cocinas industriales. También es recomendable en algunos casos las fumigaciones periódicas en redes de alcantarillado y espacios vulnerables, siempre por profesionales autorizados.

