El Consejo de Ministros ha aprobado este martes un paquete económico de 236 millones que está destinando a seguir modernizando las Fuerzas Armadas españolas, con muchas carencias después de décadas de baja inversión debido a la crisis económica de principios de siglo, y que se está viendo resarcidas desde que la OTAN exigió el aumento de los presupuestos de Defensa y la invasión rusa de Ucrania devolvió a los políticos europeos a la realidad.
El mayor de las cuantías, que tiene un montante económico de 203 millones de euros, está destinado para lanzar un contrato para la adquisición vehículos pesados de transporte logístico con el fin de incrementar el rendimiento logístico en las actividades de abastecimiento, mantenimiento y transporte, tanto en territorio nacional, como en los distintos escenarios internacionales donde se despliegan las Fuerzas Armadas.
El contrato, según la referencia del Consejo de Ministros hecha pública por el Palacio de La Moncloa, tiene una duración de cuatro años, aunque existe la posibilidad de prorrogarlo por dos años más.
El segundo contrato aprobado, con una cuantía de 33 millones de euros, está destinado a la compra de granadas de mano que garantiza la operatividad de las unidades tanto en actividades de instrucción y adiestramiento como en el desarrollo de las misiones en el exterior, además de completar la reserva de munición de la Fuerza Conjunta y la Reserva del Ejército de Tierra.
El contrato, tendrá una duración de cuatro años desde la formalización o hasta agotar el valor estimado, con posibilidad de un año de prórroga.
Por otra parte, el Gobierno también se ha aprobado la celebración de un contrato de 19,9 millones de euros para que la empresa pública ISDEFE (Ingeniería de Sistemas para la Defensa de España) realice "actividades de carácter material y técnico" en el Centro de Sistemas y Tecnologías de la Información y las Comunicaciones del Ministerio de Defensa (CESTIC).