
Las Fuerzas Armadas españolas han aumentado en las últimas horas su despliegue en Rumanía bajo bandera de la OTAN. A los seis cazas Eurofighter Typhoon del Ejército del Aire y el Espacio que se encuentran desplegados en este país de Europa del Este para ayudar en la protección y defensa del espacio aéreo local, principalmente frente a la amenaza de Rusia, se ha unido ahora un avión de transporte A-400M con capacidad de reabastecimiento en vuelo.
La llegada de esta nueva aeronave a la zona, que pertenece al Ala 31, con base en Zaragoza, va a servir para aumentar tanto el rango de acción de los cazas españoles como su tiempo de vuelo, según explican fuentes del Estado Mayor de la Defensa (EMAD). Un tipo de misión para el A-400M que no es nuevo, pues ya se ha llevado a cabo en las misiones de Policía Aérea en el Báltico en los últimos meses.
La llegada de este nuevo avión, junto a los pilotos, mecánicos y técnicos que le acompañarán, supone un aumento destacable del número de efectivos desplegados en el denominado Destacamento Paznic, que se encuentra en la base aérea Mihail Kogalniceanu, en el sureste de Rumanía, junto a la localidad costera de Constanza. Una instalación militar que se empieza a convertir en clave para la OTAN en la zona.
Los cazas Eurofighter Typhoon del Ala 14 (Albacete) que se encuentran ahora en el país de los Cárpatos llegaron a la zona a finales del mes de noviembre para dar el relevo a los cazas F-18 del Ala 15 (Zaragoza) que se encontraban anteriormente. Desde entonces se han realizado cerca de 400 horas de vuelo en aproximadamente 200 misiones, que incluyen tanto misiones aire-aire como aire-tierra, realizadas en el arco diurno y nocturno.
Éste destacamento aéreo no es el único despliegue español que se encuentra en estos momentos en territorio rumano bajo bandera de la Alianza Atlántica. Desde hace unos meses se encuentra también desplegado en el país un destacamento de unos 250 infantes de marina que se han unido a la Brigada Multinacional de la OTAN que se encuentra allí bajo mando francés.
Además, también se encuentra en el país otro destacamento español, denominado Tigru, compuesto por una cuarentena de efectivos del Ejército del Aire y el Espacio y por un radar AN/TPS-43M del Grupo Móvil de Control Aéreo (GRUMOCA), que tiene como misión controlar el espacio aéreo rumano para detectar la entrada de posibles amenazas aéreas, principalmente aeronaves militares rusas.

