En una época en la que el cavallino rampante dominaba el asfalto y en la que un alemán machacaba con puño de hierro todos los registros habidos y por haber en la Formula 1, un guaje de Oviedo decidió cambiar las reglas del juego. El 25 de septiembre se cumplen 19 años de una de las gestas más importantes en la historia de la Formula 1, 19 años desde que un país sin cultura en el deporte del monoplaza, encendía el televisor para ver a un niño competir contra el más grande hasta el momento. Se cumplen 19 años del primer Mundial de Formula 1 de Fernando Alonso.
El campeonato que más se recuerda del asturiano es sin duda el primero, el de 2005. Aquel año en España, la F1 tuvo una media de 3.671 millones de espectadores, una cuota media de pantalla del 56%, la más alta de Europa en aquel momento, algo insólito en un "país sin cultura de la Formula 1" en palabras de nuestro protagonista en el año 2005. Te cuento lo que pasó.
Michael Shcumacher iba encarrilando títulos de campeón del mundo consecutivamente a inicios de los 2000 y parecía el más fuerte de cara a ese año, pero McLaren acabaría siendo la bestia negra. En el año 2002, Reanult absorbió al equipo Benetton de Formula 1 con Patrick Faure, Bob Bell y Flavio Briatore al mando del equipo. La confianza en para construir las bases del proyecto recayeron en Giancarlo Fisichella y un jovencísimo Fernando Alonso. Nadie pensó en aquel momento que el joven asturiano pudiera hacer sombra a un piloto de 29 años ya consagrado en el mundial, pero así fue.
El dominio rojo, aun tardaría en desvanecerse, pero la primera victoria de Alonso en Hungría 2003, aun es recordada, y solo era un anticipo de lo que se le venía encima al equipo Ferrari. Sin embargo, para sorpresa de todos, en el año 2005, el rival a batir no sería la escudería italiana, las cosas no funcionaban en Maranello, y McLaren resurgiría en busca de su noveno mundial de constructores, adaptándose mejor al cambio de reglamento de aquella temporada.
La FIA, empeñada en reducir los gastos de las escuderías para garantizar la supervivencia de la competición, introdujo para aquella temporada cambios y revolucionarias normas. Los cambios más importantes afectaban a los neumáticos –pudiendo utilizar un solo juego de ruedas para la clasificación y la carrera– y a los motores –un único propulsor para cada dos grandes premios–. Renault, un equipo joven y de presupuesto ajustado, celebró los cambios y se adaptó a la nueva situación, que otorgaba una importancia inusual a un aspecto antes secundario, la fiabilidad.
Una fiabilidad que McLaren, que aunque volaba sobre la pista con el coche número 6 de Kimi Räikkönen, la poca fiabilidad del monoplaza hizo perder demasiados puntos al finlandés y Alonso y Renault, lo supieron aprovechar. Hasta en 5 de 19 grandes premios de aquella temporada, Räikkönen, tuvo que abandonar y se quedó sin puntuar y, aunque tanto el escandinavo como el asturiano ganaron en siete ocasiones aquella temporada, Alonso solo se quedó sin puntuar solo en tres carreras.
Aquella temporada es una de las más emocionantes que se recuerdan y la clasificación final, así lo refleja. Fernando acabó con 133 puntos, frente a los 112 de Räikkönen y Renault consiguió su primer mundial de constructores con 191 puntos, nueve más que el equipo McLaren.
Este grito foi demasiado Fernando Alonso em 2005 https://t.co/DfFk1SMRdn pic.twitter.com/fzCZIa4azH
— Zé Paulino (@Ze_Paulino02) January 20, 2022
Con ese grito, Alonso se proclamó campeón del mundo de Formula 1 un 25 de septiembre de 2005 en Brasil, a dos grandes premios de que terminara el mundial, y sin que las cuatro victorias del finlandés en las últimas siete, le desestabilizaran. Fernando ganaría al año siguiente el bicampeonato y Kimi tendría su revancha en 2008 con Ferrari gracias, en parte a las peleas internas entre Alonso, Hamilton y el equipo McLaren, pero esa es otra historia...