Verstappen enfría la emoción del Mundial con la pole del sprint en Austin

El holandés Max Verstappen (Red Bull) se ha hecho con la pole del sprint de este sábado en el Gran Premio de Estados Unidos —decimonovena prueba de la temporada de Fórmula 1—, en un apretado primer asalto en Austin donde respondió a la amenaza de McLaren y a las mejoras del resto de la parrilla.

El campeón enfrió la esperada emoción de las seis carreras que quedan del Mundial, en busca de puntos ya desde el sprint para mantener a raya a Lando Norris, que partirá cuarto con los primeros puntos del fin de semana en juego. Entre ambos está el título y Verstappen sigue aferrado a la cabeza con lecciones de pilotaje.

Así lo demostró el de Red Bull en la SQ3, un único intento de vuelta rápida donde firmó el mejor crono por sólo 12 milésimas sobre el británico George Russell. Charles Leclerc (Ferrari), Norris y Carlos Sainz (Ferrari) siguieron en la parrilla, donde sorprendieron los Haas, mientras que el Mercedes de Lewis Hamilton partirá desde la séptima posición.

En clave española, Sainz, que había dominado la única sesión de libres este mismo viernes en el Circuito de Las Américas, no remató la faena en ese último intento por buscar la pole. Con todo, los Ferrari confirmaron que su progresión es real, aunque las mejoras del resto de equipos puede que se hagan notar también en Austin.

Mientras, para Fernando Alonso no fue un buen inicio, sin tiempo para probar ni resultados inmediatos en su Aston Martin. Los dos coches verdes —también el de Lance Stroll— se quedaron fuera en la SQ2, y el asturiano, con su vuelta incluso anulada por salirse de los límites de pista, saldrá decimocuarto en el sprint.

Más sonada si cabe fue la eliminación de Sergio Pérez (Red Bull) o la de Oscar Piastri (McLaren), quien se quedó fuera a las primeras de cambio y dejará solo a Norris. Los coches de color papaya se quedaron cortos en su objetivo de destronar a los Red Bull y Verstappen, que mantiene 52 puntos de renta en la clasificación sobre el británico pese a llevar ocho carreras sin ganar, no piensa regalar un Mundial de F1 que entra ya en su recta final.