Las palabras de Pepe tras acabar el encuentro ante el Valladolid no sólo han sentado mal a Mourinho. También en el seno del Real Madrid. Y, según avanzó este martes Marca TV, el club blanco estaría estudiando las declaraciones para determinar si vulneran el régimen interno y, por tanto, sancionar disciplinariamente al portugués.
En la directiva madridista no se explican cómo es posible que, a dos semanas de la final de la Copa del Rey, cada día haya más divisiones y enfrentamientos dentro del vestuario. La voluntad desde arriba, como ya pidió Florentino, es que se guarde respeto y unidad, pero lo cierto es que se anda lejos de conseguirlo.
De hecho, desde varios frentes se asegura que el club había pedido a Mourinho que no diera la rueda de prensa de ayer, con el objetivo de estar todos centrados en la Copa, conscientes de lo que podía pasar. Pero el portugués hizo caso omiso.
En cualquier caso, lo que parece claro es que Pepe lo terminará pagando. De momento, se ha quedado fuera de la lista para el encuentro de esta noche; podría ser expedientado y, además, todo apunta a que será uno de los futbolistas a los que se buscará salida el próximo verano con el objetivo de ingresar dinero para hacer frente a nuevos fichajes.