Es cuestión de tiempo. El Betis será equipo de Primera División en los próximos días salvo debacle. El conjunto de Pepe Mel goleó 5-1 al Lugo con un gran Rubén Castro y necesita una victoria en Santander ante el Racing y la derrota del Girona en casa del Alavés para subir a la Liga BBVA.
Tras la destitución de Julio Velázquez, que pagó los platos rotos del mal inicio, llegó la continuidad en la victoria con Merino y Pepe Mel. En la recta final, el Betis está dejando escapar muy pocos puntos pese a la presión de equipos que han sido muy regulares durante todo el curso como Girona, Sporting, Las Palmas y Valladolid, un poco menos los dos últimos.
A falta de cuatro jornadas, parece que Girona y Sporting se jugarán el segundo mientras que Las Palmas y Valladolid tienen asegurado el playoff. El Zaragoza aún tendrá que pelear para evitar que el Llagostera, auténtica revelación del campeonato, le quite la sexta plaza.
La tranquilidad de los equipos de la zona media será decisiva para la lucha por el ascenso o el descenso. Serán jueces de una Liga que esperará a al última jornada para decidir casi todos los puestos conflictivos. Alcorcón, Leganés, Numancia, Mirandés o Lugo jugarán con la calma de tener los deberes hechos.
Por abajo, no hay respiro. El Racing quiere salir del descenso evitando las celebraciones del Betis y conseguir pasar a un Osasuna, que ha mejorado con su nuevo entrenador. Sabadell y Barcelona B seguirán peleando junto al equipo rojillo mientras que el Recreativo de Huelva está casi sentenciado.