Tremendo varapalo para la selección francesa. Karim Benzema también dice adiós al Mundial de Qatar tras haber abandonado el entrenamiento de este sábado con los bleus en Doha, el primero que realizaba junto al resto de compañeros.
El delantero sintió un fuerte dolor muscular en la pierna izquierda, en una zona diferente a la que le venía molestando en las últimas semanas y que había provocado que, hasta ahora, no se entrenara con el resto del equipo.
En un principio se pensaba que Benzema no estaría disponible para el debut el martes frente a Australia pero sí para el resto del torneo. Sin embargo, los peores pronósticos se han acabado confirmando: el delantero sufre un desgarro muscular en el cuádriceps izquierdo, según han determinado los primeros exámenes médicos que hablan de un período de baja de unas tres semanas. De esta forma, la Federación Francesa de Fútbol (FFF) confirmaba a última hora de la noche que Karim se pierde definitivamente el Mundial.
El delantero del Real Madrid, último ganador del Balón de Oro, se unía este sábado por vez primera al entrenamiento en grupo, pero, tras participar en varios ejercicios —en los que el seleccionador, Didier Deschamps, le incluyó en el grupo de los titulares— tuvo que abandonar la sesión.
Deschamps tiene hasta el próximo lunes, en la víspera del debut de Francia, para convocar a un nuevo efectivo si pierde a un jugador por lesión.
Un tremendo varapalo para Francia, que también ha tenido que afrontar ya las bajas del central Presnel Kimpembe y del delantero Chritophe Nkunku, sustituidos respectivamente por Axel Disasi y Kolo Muani. Sin olvidar que, antes de dar su lista, Deschamps también perdió a otros dos jugadores importantes como son los centrocampistas Paul Pogba y N’Golo Kanté.
Pero la baja de Benzema es de más peso, debido al buen rendimiento que venía teniendo Karim con la selección bleu, en la que se había convertido en una pieza clave del colectivo de Deschamps como pareja ofensiva con Kylian Mbappé.
En el último mes Benzema sólo ha disputado algo menos de media hora de juego con el Real Madrid.
Una "fatiga muscular" en la que muchos vieron su deseo de preservar su físico de cara al Mundial, una teoría refutada por el propio futbolista, que aseguró que no se sentía al cien por cien. Y ahora esta inoportuna ausencia le ha acabado dando la razón a Benzema: una enorme decepción para el nueve madridista, que, tras recibir el mes pasado el Balón de Oro, aseguró que convertirse en campeón del mundo era ahora el principal objetivo de su carrera.
El delantero tampoco estuvo en el Mundial de Rusia 2018, apartado del equipo por Deschamps tras ser acusado de complicidad en un chantaje, en el llamado caso Valbuena que le valió una condena a prisión sin cumplimiento. Tras tres años y medio de ausencia, el seleccionador le levantó el veto antes de la pasada Eurocopa, en la que comenzó a revelarse como una figura importante del equipo, en paralelo a las grandes actuaciones que fue firmando con el Real Madrid.
El principal candidato para sustituir a Benzema en el once ante Australia es el veterano Olivier Giroud, de 36 años, que ha regresado al equipo tras meses de ausencia y que está a dos tantos de igualar con Thierry Henry como máximo goleador histórico de Francia.