Las pequeñas que fueron víctimas del pederasta de Ciudad Lineal tendrán que realizar este lunes una rueda de reconocimiento para identificar a su agresor, según ha podido confirmar esRadio. La Policía tratará de agilizar este trámite para acortar la pesadilla de las pequeñas.
El "enemigo público número uno", según le definió este miércoles la delegada del Gobierno, Cristina Cifuentes, planificaba cada uno de sus abusos hasta el punto de meter Orfidal en las golosinas que les daba a las pequeñas, según relata este jueves El Mundo.
Así lograba engañarlas para que se tomasen el lorazepam que permitía que perdieran la consciencia y que luego no recordasen lo que había ocurrido. Según el informe policial, "aprovechaba el uso de narcóticos sedantes con principios activos como el Lorazepam para anular la voluntad de las menores y perjudicar su recuerdo". "Las consecuencias de tomar este psicofármaco, que se utiliza para tratar estados de ansiedad y siempre bajo prescripción médica, son sobretodo la sedación", explicaron fuentes policiales al citado diario.
Es por este motivo que se la acuse además de los delitos sexuales de dos delitos contra la salud púbica y de otros dos de tentativa de homicidio.
El pederasta presencia los registros
Agentes de la Policía nacional han registrado desde primera hora de este jueves una vivienda vacía donde pudo actuar el presunto pederasta de Ciudad Lineal (Madrid), una labor que se ha llevando a cabo delante del detenido y su abogado, han confirmado a Europa Press desde la Jefatura Superior de Policía de Madrid.
El presunto agresor sexual ha llegado a la vivienda sobre las 9.22 horas. El coche policial camuflado en el que iba a bordo ha sido recibido a gritos y con abucheos por parte de vecinos presentes en el entorno del domicilio.
La Policía Nacional registra la casa vacía que había alquilado el supuesto pederasta de Ciudad Lineal y donde cometía las violaciones, y la vivienda en la que vivía con su madre, según informó ayer la delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes.