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El AVE paralizado en Cataluña, ¿robo o sabotaje?

El Ministerio de Fomento ha abierto una investigación. Es la primera vez que se produce una rotura del cable de fibra óptica.

El tráfico ferroviario en Cataluña ha vivido una mañana caótica cuyas causas aún se están investigando. Poco antes de las siete de la mañana, el robo o sabotaje de cables de fibra óptica entre Vilafranca del Penedès y Gelida (Barcelona) ha comenzado a paralizar los trenes. La fibra óptica es la que permite la comunicación del control de Renfe con los convoyes y no era seguro mantener la circulación ferroviaria.

En total, 43 trenes han permanecido parados o con retraso y unos 13.000 viajeros han resultado afectados. La situación ha perjudicado también a muchos otros viajeros procedentes del resto de España.

El servicio en la ha quedado normalizado a primera hora de esta tarde. Según ha informado Renfe, que ha reabierto la línea a las 10:15 horas hasta normalizar el servicio paulatinamente, a los viajeros afectados por trenes suprimidos, o que no hayan realizado su viaje, se les ha reintegrado el importe de sus billetes, sin gastos de anulación.

La gestora de infraestructuras ferroviarias Adif ha informado también del robo de 4 elementos de cable de cobre para toma de tierra en la línea de alta velocidad entre Tarragona y Figueras (Gerona), que paralizó el tráfico ferroviario desde las 6.58 y las 10.15 horas. Fuentes de Adif han precisado sobre estos elementos de cobre que "son de una longitud menor", dispuestos sobre el trazado a modo de picas.

A esta sustracción de elementos de cables de cobre para toma de tierra se le añaden los dos cortes que se han producido en el cableado de fibra óptica, en las vías 1 y 2, que afectaron a la línea de comunicaciones principal y de respaldo, esta última relacionada con las emergencias.

El gestor de infraestructuras ha precisado que los cortes se han detectado en la vía 1, en el kilómetro 568,432 del trazado, y en la vía 2, en el kilómetro 568,485, con 143 metros de distancia entre uno y otro corte.

Adif también ha informado de que ha sido seccionado el vallado que protege toda la línea ferroviaria, con un boquete de 1 metro de largo por 0,5 metros de ancho, en el kilómetro 568,378.

El Ministerio de Fomento ha anunciado una investigación para determinar las causas de esta incidencia. La investigación tratará de esclarecer si los cortes en los cables de fibra óptica responden a una posible confusión en un intento de robo del cable de cobre o a un sabotaje, según han señalado fuentes del departamento que dirige Ana Pastor.

Es la primera vez que se produce una rotura del cable de fibra óptica, necesario para establecer la comunicación con los trenes.

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