Una decena de separatistas monta un diorama del 15-M en la plaza de Cataluña de Barcelona

Son los irreductibles, la decena de miembros de los Comités de Defensa de la República (CDR) que llevan acampados en el centro de Barcelona desde hace seis días. Junto a medio millar de personas, fueron desalojados del parque de la Ciudadela, emplazamiento del Parlament, tras la no sesión de investidura y decidieron continuar su protesta en la plaza más conocida de la Ciudad Condal.

El pasado martes 30 de enero, los CDR asumieron el liderazgo de las protestas separatistas. La Assemblea Nacional Catalana (ANC) y Òmnium anularon sus manifestaciones ante la suspensión del crucial pleno y el temor a un pinchazo. Las masas separatistas han dado muestras de flaqueza en las últimas convocatorias y la gaseosa situación política atenaza a las organizaciones "cívicas" del proceso.

El día en que se debía celebrar el pleno de investidura de Puigdemont, un grupo de irreductibles se instaló en la Ciudadela, pero tras un tortuoso proceso asambleario amenizado con unos pocos porrazos de los Mossos, los concentrados decidieron levantar el campamento en nombre del pueblo de Cataluña. Pero unos pocos se resisten a deponer tal actitud y han instalado sus reales y tiendas de campaña en el cogollo de Barcelona.

Los elementos en forma de borrasca no amedrentan a los escasos partidarios de las vías 15-M, primavera árabe y Maidán para aplicar la república catalana proclamada por Puigdemont en las escaleras de la cámara regional el 27 de octubre del 17. Disponen de una cierta parafernalia y tolerancia municipal para resistir los embates de las bajas temperaturas y la lluvia a la espera de que el cambio en las condiciones meteorológicas reclute más partidarios dispuestos a hacer noche en tiendas de campaña en el centro de la ciudad.

El presidente del grupo municipal del PP en Barcelona, Alberto Fernández, ha pedido a la alcaldesa Ada Colau que aplique los reglamentos de urbanidad en la vía pública y desaloje a los acampados. El edil conservador opina que "no puede ser que una vez más el ayuntamiento de Barcelona haga dejación de sus funciones según la ideología de quien infrinja las normas". El concejal ha subrayado además que en la plaza de Cataluña se registra una suerte de "top manta" de souvenirs del 1-O.