
La OTAN está realizando en Polonia las mayores maniobras militares de su historia desde el final de la Guerra Fría, denominadas Steadfast Defender. El objetivo es demostrar que los ejércitos aliados pueden trabajar en equipo y que están preparados para afrontar cualquier tipo de desafío militar. Participan más de 90.000 soldados de una treintena de países en los 14 ejercicios que están previsto entre principios de marzo y el próximo mes de mayo.
El primero de los ejercicios militares tuvo lugar hace unos días en el campo de maniobras de Drawsko Pomorskie, que con una extensión de 340 kilómetros cuadrados está ubicado en la región de Pomerania Occidental, en el noroeste de Polonia, cerca de la frontera con Alemania. Y allí se pudo comprobar tanto la pericia en el campo de batallas de las unidades españolas desplegadas y de los efectivos de una decena más de países.
Las Fuerzas Armadas españolas desplegaron 300 militares de la Brigada 'Guzmán el Bueno' X del Ejército de Tierra, con base en Córdoba, de la Agrupación Logística número 21 (AALOG 21), con sede en Sevilla, y del Regimiento de Transmisiones número 1 (RT1) del Ejército de Tierra, con base en Huesca. Iban acompañados por 65 vehículos, entre los que destacaban carros de combate Leopardo 2E o vehículos de combate Pizarro.
Recrearon cómo deberían comportarse las Fuerzas de Muy Alta Disponibilidad de la OTAN (VJTF, por sus siglas en inglés) en casa de que uno de los países aliados fuera atacado por una tercera nación. Todo ello, lógicamente, con la mirada puesta en la Rusia de Vladimir Putin, que hace dos años atacó por segunda vez a Ucrania y que amenaza de forma incesante a los países de la Alianza Atlántica.
Uno de los retos clave de este primer ejercicio fue una operación de paso de vehículos pesados sobre el río Vístula, que atraviesa Polonia de sur a norte, que fue realizada sobre plataformas de ingenieros, mientras era apoyada por unidades de artillería de largo alcance y por la aviación aliada, exactamente cazas de combate Su-22 de la Fuerza Aérea Polaca, que hicieron vuelos rasantes para dar apoyo a las operaciones militares en tierra.
Las plataformas anfibios empleadas en el paso del Vístula fueron las M3 aportadas por Alemania y las EFA por Francia. Son vehículos anfibios que se despliegan haciendo de puente. Junto a los Leopardo 3E y Pizarros españoles también atravesaron el río otros vehículos militares, como carros Abrams de Estados Unidos, blindados BMC Vuran de Turquía, carros AMX-56 Leclerc de Francia, blindados Boxer de Alemania o vehículos Chacal del Reino Unido.

