Menú

Aznar, a Rajoy: "Nada es fácil, pero es imprescindible elegir"

Reclama un "rearme moral urgente" ante el terrorismo. "La debilidad atrae al riesgo", avisa, sin presencia del Gobierno. Sí estuvo Gallardón.

"No se puede pretender mantener un modelo de bienestar apacible y generoso tapándose los ojos". En su reaparición pública, José María Aznar se revolvió ante el "buenismo" imperante en Europa y avisó de que es "nuestro estilo de vida" el que está amenazado por el terrorismo. "No podemos quedarnos con los brazos cruzados. No podemos desentendernos de la libertad y la seguridad", arguyó, sin que ningún representante del Gobierno le estuviera escuchando. Sí asistió Alberto Ruiz-Gallardón, que el martes fue elegido nuevo patrono de la Fundación FAES.

El expresidente, en la presentación de una biografía sobre Konrad Adenauer de su propia casa, pidió tirar a la basura análisis "prefabricados y desconectados de la realidad" según los cuales Occidente tiene la culpa de todo. A sus ojos, España y sus socios europeos están en guerra, y han de tomar decisiones, aunque sea difíciles. "La debilidad atrae el riesgo", llegó a decir, sin señalar a ningún mandatario. Insistió: "No se pierde la libertad cuando se actúa con el rigor necesario ante amenazas críticas y agresiones brutales a la seguridad, no habrá riesgo para la libertad mientras las instituciones democráticas y el Estado de derecho cumplan con sus funciones".

Durante su intervención, como es habitual en él, no citó en ningún momento a Mariano Rajoy. Pero, en su calculado análisis del contexto actual, se refirió al debate político sobre si el Ejecutivo ha de tener una mayor implicación militar frente a Daesh. "Tenemos ante nosotros dilemas estratégicos, políticos y militares. Nada es fácil, pero es imprescindible elegir", destacó, en un claro mensaje al jefe del Ejecutivo.

La Moncloa insiste en que nada se ha ofrecido y nada se ha reclamado por parte de Francia, y se mantiene la tesis de que toda hipotética actuación se hará bajo el mandato de organismos internacionales –ya se Naciones Unidas, la OTAN o la UE- y con el respaldo de las Cortes generales. En otras palabras, Rajoy quiere retrasar la toma de decisiones hasta después de las elecciones generales y, hasta entonces, seguirá descolgando el teléfono cada vez que sea necesario para intentar que sus contrincantes políticos no utilicen la espinosa cuestión en campaña. Tal y como informó este diario, el temor al "No a la guerra" en el PP es más que palpable.

"Todos tendrán y tendremos que definir las opciones, elegir entre las distintas formas de abordar el problema", reiteró una vez más Aznar. Si bien, de sus palabras se desprende que, a su juicio, es el momento de plantar cara y dar una respuesta sin ambigüedades. Reclamó "rigor", y arguyó sobre los terroristas: "No responden a un por qué sino a un para qué. Y ese para qué es acabar violentamente con todo lo que nos define, incluida la práctica pacífica y libre del Islam dentro de nuestros países amparada por nuestra libertad religiosa".

Sin noticias sobre la campaña

"Desde luego lo que no sirve para asegurar la libertad es no estar dispuestos a pagar el precio de la seguridad; lo que no sirve a la seguridad es no estar dispuestos a preservar la libertad; y lo que no ayuda al bienestar es desentenderse de la libertad y de la seguridad", continuó un Aznar que todavía no ha aclarado si participará en la campaña del PP, aunque todo hace presuponer que no. De hecho, su equipo a día de hoy sigue deslizando que no ha recibido invitación formal de Génova, que tampoco da detalles.

Con independencia de ello, lo que quería Aznar era defender una posición clara ante el terrorismo. "No podemos seguir viviendo en un estado de conocimiento inútil. Tenemos enemigos concretos y no son el resultado de un déficit de diálogo y comprensión", dijo. "En la asombrosa forma de autoodio a nuestra civilización, a sus valores, prosperan las expresiones más perversas de cobardía e insolidaridad", subrayó. Una "crisis integral" ante la que exigió un "rearme moral urgente". No hay opción, según el expresidente. Pilar Marcos, integrante de la lista del PP por Madrid y próxima a FAES, fue una de las dirigentes con más peso de la formación en la sala.

Temas

En España

    0
    comentarios