
Pere Aragonès, segundo de Oriol Junqueras en ERC y presidente de la Generalidad, ha asegurado que "Cataluña debe poner un precio" a una eventual investidura de Pedro Sánchez para impedir un Gobierno de coalición entre PP y Vox. Aragonès ha hablado sin tapujos de "precio" y ha instado a recomponer la unidad separatista entre ERC y Junts per Catalunya (JxCat) para tener más fuerza en el chantaje a un hipotético nuevo gobierno de Sánchez.
El dirigente separatista no ha fijado las condiciones para reeditar el apoyo, con lo que se da por descontado que el independentismo insiste en la amnistía de todos los golpistas, lo que facilitaría el regreso de Carles Puigdemont, y un referéndum de autodeterminación pactado con el Estado, más el habitual trato de favor en los Presupuestos.
Ante la hipótesis de que los votos en el Congreso de ERC y JxCat sean imprescindibles para evitar un Ejecutivo del PP en coalición con Vox, Aragonès considera que el apoyo a Pedro Sánchez no se debe dar por supuesto como un "mal menor", sino que debe llevar aparejado un "precio". La novedad sería que en esta ocasión ERC y Junts irían de la mano en el chantaje.
Cooperación entre independentistas
Para Aragonès, es "imprescindible" que los independentistas pasen de una "dinámica de competencia" a una "dinámica de cooperación" y ha puesto como ejemplo el frustrado pacto para el gobierno del Ayuntamiento de Barcelona entre el candidato de Puigdemont, Xavier Trias, y el de Oriol Junqueras, Ernest Maragall. Aragonès ha hecho estas declaraciones en la emisora de la Generalidad, Catalunya Ràdio.
Desde la celebración de las elecciones municipales, que supusieron la pérdida de trescientos mil votos para ERC, Aragonès viene haciendo llamamientos a la concordia independentista y a favor de un "frente democrático" para afrontar la eventualidad de que las urnas arrojen el 23 de julio un Gobierno de PP y Vox. Pero la propuesta también sería de aplicación en el caso de que Sánchez pudiera repetir la misma operación que en la pasada investidura. La tesis de Aragonès es que ERC y JxCat pueden presionar con más eficacia si negocian juntos. A tal efecto, ha abogado por "fijar unos mínimos compartidos en materia de derechos, contra la represión y en recursos, competencias y lengua". Es decir, lo mismo que en la última legislatura pero multiplicado por dos, ERC y Junts.

