
Vox intenta desviar la atención sobre la crisis que atraviesa en Castilla y León, tras las denuncias de varios cargos electos que han levantado la voz exigiendo más democracia interna. Los de Santiago Abascal buscan transmitir calma y estabilidad, eludiendo hacer mención al ya exlíder de Vox en la región.
El diputado nacional y portavoz de Vox en el Ayuntamiento de Madrid, Javier Ortega Smith, ha señalado que, en las declaraciones de García Gallardo en su carta publicada en redes sociales, "hay una parte que es cierta y otra que no se ajusta completamente a la verdad", sin especificar qué puntos exactamente. En su misiva, Gallardo reconocía discrepancias con la dirección nacional de Vox, afirmando que "acabar con las oligarquías de los partidos es una quimera".
Ortega Smith ha dejado claro en varias ocasiones que no comparte muchas de las decisiones tomadas por la dirección de Vox en el último año, llegando incluso a buscar, según informó Libertad Digital, apoyos para desafiar a Santiago Abascal por la presidencia de Vox en 2024. Un movimiento crítico que sin embargo llegó a su fin cuando Abascal optó por incluirle en el Comité Ejecutivo Nacional.
En todo caso, el dirigente de Vox ha afirmado que continúa luchando "por el mismo proyecto y las mismas ideas" plasmadas en el manifiesto fundacional del partido, a pesar de los cambios en los Estatutos, como la eliminación en 2022 de las primarias, que ha otorgado más poder a la Ejecutiva Nacional del partido.
Por el momento, Ortega Smith no tiene intención de abandonar la política, aunque ha transmitido mensajes ambiguos a los medios tras la salida de García Gallardo. "El tiempo juzga a todos y pone a cada uno en su sitio", ha afirmado, sugiriendo además que "cada uno debe ser consecuente con las decisiones que toma", sin referirse directamente a la negativa del burgalés de expulsar a los dos procuradores de Vox en Salamanca y Burgos, Javier Teira y Ana Rosa Hernando, críticos con la dirección nacional.
Ortega Smith llegó a ser muy crítico con la dirección del partido, arriesgándose a ser sancionado por Vox debido a sus mensajes en redes sociales, donde pedía "no olvidar de dónde venimos" o incluso afirmaba en una entrevista que "Vox no podía convertirse en una agencia de colocación" tras la marcha de Iván Espinosa de los Monteros.
Precisamente, el diputado nacional ha aseverado que García Gallardo no es el primer dirigente de Vox que se marcha del partido reconociendo que no ha no ha hablado con Gallardo porque "no tenía mucho trato".