A pesar de que la Fiscalía ha pedido el archivo de la causa contra David Sánchez, se espera que la juez Beatriz Biedma mantenga su postura, por lo que será la Audiencia Provincial de Badajoz la que deberá decidir si abre o no juicio oral tanto contra el hermano del presidente del Gobierno como contra el resto de los imputados.
Aunque todas las posibilidades están abiertas, se da prácticamente por hecho que todos ellos tendrán que desfilar por el banquillo de los acusados, ya que no es la primera vez que las partes personadas apelan al mencionado tribunal y este avala la instrucción de su compañera, asestando un duro golpe a sus pretensiones.
Según las acusaciones populares, el músico "se presentó a la convocatoria, a conciencia de que las entrevistas al resto de candidatos eran un mero paripé" y, "pese al ilegal nombramiento, no desempeñó su puesto de trabajo, no trabajando habitualmente", aunque ello "no fue óbice para que sí percibiera el salario que el puesto tuvo adjudicado".
Además, "el Sr. Sánchez, se ha dedicado, organizando su propio tiempo de escaso trabajo, a actividades diferentes a aquellas para las que se le ha pagado un sueldo público, cuyo fin principal ha sido el de ir creándose un currículum en el mundo de la música". Pero la cosa no queda ahí. "No contento con todo ello, don David —continúa el escrito— quiso que un amigo íntimo suyo de hace al menos veinte años, y colaborador habitual en sus proyectos musicales personales se incorporase a la Diputación de Badajoz", denuncian en referencia a la posterior contratación de Luis Carrero.

