
Nuevas revelaciones en torno al régimen chavista de un mando militar conocedor de los entresijos de la tiranía venezolana después de que el Pollo Carvajal comenzara a tirar de la manta. El general Clíver Alcalá, que cumple una condena en Estados Unidos de 21 años de cárcel por colaboración con las FARC, ha enviado una carta a Donald Trump con información que considera "relevante para la seguridad nacional de EEUU y para la comprensión de las dinámicas criminales y políticas en mi país que se extienden más allá de sus fronteras".
Alcalá, que fue General de División del Ejército chavista, dice sobre los cargos que lo mantienen en prisión que recibió "órdenes directas de mi entonces superior Hugo Chávez" y ahora quiere "ofrecer información sobre la estructura criminal que gobierna dictatorialmente a Venezuela, conocida actualmente como el Cártel de los Soles", en alusión a la trama de narcotráfico vinculada al Ejército chavista y a la cúpula del régimen.
"Dos figuras clave en toda esta red criminal son Jorge y Delcy Rodríguez", dice el general sobre la vicepresidenta venezolana, que a punto estuvo de visitar España de la mano del Gobierno de Pedro Sánchez, y de su hermano, presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela. "Con un perfil público deliberadamente calculado y bajo, ellos son los verdaderos cerebros maquiavélicos detrás de los líderes de la corporación de cárteles conocida como el Cártel de los Soles", revela en medio de un incremento de las tensiones entre la tiranía y Estados Unidos y de rumores sobre la salida de Nicolás Maduro y de la identidad de su sucesor en el intento de prolongar el régimen.
A Maduro lo presenta como una marioneta de los hermanos Rodríguez: "Ellos son los verdaderos controladores de Nicolás Maduro y Diosdado Cabello. La supervivencia del régimen en el poder depende en gran medida de estas dos personas", avisa.
No son las únicas revelaciones del general: también revela la forma en que Maduro se ha apoyado en organizaciones narcoterroristas como la conocida como Tren de Aragua, que habría "utilizado para sus fines criminales". El exgeneral rememora la toma en 2011 de la cárcel de Tocorón, donde estaban encarcelados líderes del grupo y cómo el Gobierno presionó para "impedir la operación". Desde entonces y en particular desde la llegada al poder de Maduro, explica, se crearon "estructuras criminales basadas en las cárceles", con comunicación directa hacia él y con Antonio Enrique Álvarez Cisneros, ex ministro de Deportes con Chávez y conocido como Potro Álvarez como intermediario. Las cárceles, revela, funcionaban "como depósitos de armas y otros elementos ilegales".
Alcalá también menciona el fraude electoral del que ya habló el Pollo Carvajal a través de "la tecnología electoral de Smartmatic: "La mayoría de las elecciones en Venezuela han sido manipuladas por el gobierno de Maduro", avisa, señalando a los hermanos Rodríguez como "los controladores de todo este sistema".
Oro y diamantes
Por otro lado, también alude a los vínculos del chavismo con Irán, situando a Maduro como el artífice de las "relaciones más sensibles", y de cómo el núcleo del chavismo trató de crear "vínculos estrechos" con congresistas estadounidenses, de los que no aporta nombres.
Por último, el exgeneral habla de las drogas y la minería ilegal "como dos de las actividades criminales más importantes del régimen venezolano en el poder". Menciona a los intentos de Maduro de que su hijo controlara "las actividades ilegales en el Arco Minero del Orinoco", con explotaciones de oro y diamantes que "servían como mercancías clave en el mecanismo de lavado de dinero del narcotráfico llevado a cabo por lo que hoy se conoce el Cártel de los Soles".
"Estoy dispuesto a testificar sobre este y otros asuntos", señala al finalizar la carta.

