
"Estamos en guerra contra un enemigo poderoso e implacable que no respeta a nada ni a nadie y que está dispuesto a usar la violencia sin ningún límite incluso cuando significa la pérdida de vidas humanas, con el único propósito de producir el mayor daño posible", dijo Sebastián Piñera en una comparecencia pública ante la prensa. "Ellos están en guerra contra todos los chilenos que quieren vivir en democracia", agregó.
El mandatario dijo que entiende que los ciudadanos se manifiesten por lo que les preocupa, pero las personas que están causando incendios, barricadas y saqueos son "verdaderos criminales". Así, hizo un llamamiento a los ciudadanos a "actuar sin ambigüedades contra esta violencia".
"Hay que tomar partido y llamo a toda las fuerzas políticas a condenar con total fortaleza esta delincuencia. Hay algunos que lo han hecho en un espacio de ambigüedad, ellos no están contribuyendo a la paz de nuestros compatriotas", expresó Piñera.
Manifestó que las autoridades han hecho "un esfuerzo gigantesco" para lograr que este lunes "sea un día lo más normal posible", con la habilitación de una de las líneas de metro y pidió solidaridad entre los chilenos para ayudarse con el transporte cuando sea necesario. "Le pido a todos mis compatriotas que nos unamos en esta batalla que no podemos perder, que nos ayudemos a que todos los demás tengamos mañana un día lo más normal posible y que logremos por fin empezar a ganar esta batalla. Nos vamos a permitir que los delincuentes se sientan dueños de este país", comentó.
Escalada de violencia "organizada"
Por su parte, el ministro del Interior, Andrés Chadwick, aseguró que el país enfrenta una escalada de violencia "organizada" para dañar la convivencia. "No nos engañemos, estamos enfrentando una verdadera escalada, que sin duda es organizada, para causar un grave daño a nuestro país y la vida de cada ciudadano", dijo en una comparecencia ante los medios de comunicación.
El ministro chileno afirmó que 10.500 militares y agentes de Policía se han desplegado a lo largo del país para tratar de resguardar el orden público e indicó que si es necesario se reforzará ese contingente. "Este Gobierno va a ejercer toda la autoridad que la ley le confiere para combatir a los delincuentes, los violentistas y quienes desarrollan estos actos vandálicos", manifestó.
Recordó que el Ejecutivo extendió el estado de emergencia, que cede el control del orden público a las Fuerzas Armadas, a todos los municipios de la región Metropolitana, y a las ciudades de Antofagasta (norte) y Valdivia (sur). Además se están tramitando los decretos para declarar el estado de emergencia en toda la región de Valparaíso y en las ciudades de Talca, Chillán, Temuco y Punta Arenas, todas en la zona centro y sur de Chile.