Navarra

El Gobierno de Navarra ha acordado exigir a Zapatero que aclare si hay "compromisos" con ETA, que diga "qué quiere que sea Navarra" y que informe al Ejecutivo autonómico "del alcance" de las negociaciones. Además, Miguel Sanz se ha comprometido a "defender la integridad" del régimen foral, "le pese a quien le pese". La exigencia del Ejecutivo autonómico viene después de que otro comunicado de la banda se refiriera a supuestos "compromisos" adoptados por los socialistas. Patxi López ha dicho este lunes que no es necesario que Batasuna-ETA condene la violencia para ser legal.

La apuesta de Rodríguez Zapatero por la legalización de Batasuna-ETA cuenta con el respaldo del candidato socialista en Navarra. "Es aconsejable y deseable. No hay otro camino si quiere debatir de temas políticos", sostiene Fernando Puras. El ungido de Zapatero se niega a rechazar el hipotético apoyo de parlamentarios proetarras a una investidura suya como presidente de la Comunidad Foral. "No quiero pronunciarme sobre hipótesis", ha respondido este sábado. Otra de las demandas terroristas en las que se muestra dispuesto a ceder es en la creación de una mesa extraparlamentaria para hablar de la anexión de Navarra al País Vasco. "No es una condición para la paz", subraya Puras, sino "un signo de normalidad democrática". Desde el PP, Jaime Mayor ha pronosticado un "tiro por la culata" de la moción socialista sobre el llamado proceso de paz en el Parlamento Europeo. Mientras, el terrorismo callejero ha vuelto a atacar, esta vez contra dos sedes del PNV.

El presidente de Navarra ha contestado a la afirmación de Fernández de la Vega en el Congreso de que la comunidad "no está en la agenda política". "Lo hemos dicho un millón de veces", dijo la vicepresidenta. Sin embargo, fuentes cercanas a las conversaciones secretas que mantienen el PSE, Batasuna-ETA y el PNV mantienen que Navarra estará presente en la mesa de partidos y en una declaración de mínimos que estarían preparando para desbloquear el proceso. Miguel Sanz ha replicado que, ante estos hechos, De la Vega "no tranquiliza a los navarros" y ha rechazado que se vaya a hablar de la comunidad en un foro en la que no está representada.

Ante la rutina del terrorismo callejero, la familiar denuncia y condena del chantaje etarra. Voz del que clama en el desierto, Mariano Rajoy ha vuelto a exigir "rectificación" al Gobierno en sus tratos con terroristas y "una contundencia absoluta contra Batasuna y ETA". La violencia y exhibiciones proetarras programadas para este fin de semana suscitan la reprobación retórica de costumbre por parte del PSOE, que tiene en su mano el poder necesario para poner fin al chantaje y no lo hace. En Toledo, el presidente del PP ha constatado que la escalada de atentados "demuestra que las cosas no van como deberían ir". Para el Gobierno, en cambio, todo transcurre según lo previsto y la vicepresidenta anunció que informarán "en estas fechas, dia arriba día abajo" de los tratos con ETA.

Las asociaciones de jueces estiman que el juez Baltasar Garzón tendrá que pronunciarse sobre la intervención de Juan Cruz Aldasoro en la manifestación impune de Batasuna-ETA celebrada este sábado en Alsasua (Navarra). El magistrado había prohibido expresamente la "participación significativa" de dirigentes de la organización ilegal proetarra, un mandato que Aldasoro desafió abiertamente, incluso retando al juez a actuar contra él. La Asociación Profesional de la Magistratura y Jueces para la Democracia creen que a Garzón no le queda otra alternativa que valorar formalmente este comportamiento.

El presidente del PP ha exigido a Rodríguez Zapatero, tras el último comunicado etarra, que "explique, con la máxima urgencia" qué es lo que "ha acordado con ETA" y si tiene compromisos con la banda. Mariano Rajoy ha asegurado, además, tener "sospechas muy fundadas" de que el PSOE prepara una "inmoralidad atroz" contra los intereses de los navarros, como sería una coalición post electoral con aquellos "partidos que quieren que Navarra deje de ser Navarra y pase a formar parte del País Vasco, que son PNV, EA, Batasuna, Batzarre, Aralar". Mientras tanto, desde el PNV se anima a Zapatero a alimentar esas sospechas. Iñaki Anasagasti le ha sugerido que  "condicione a los jueces y hable bajo la mesa" con los terroristas, para tener éxito en el llamado "proceso de paz".

El intercambio de reproches de Batasuna-ETA y el PSOE continúa, mientras los proetarras imponen su política de hechos consumados. El Gobierno ya ha empezado a negociar a oscuras y no se da por aludido de las humillantes condiciones que los terroristas ponen a la paz. Al desafío que supone convocar una nueva manifestación de la ilegal Batasuna-ETA para el próximo 13 de agosto bajo el lema Euskal Herria. Autodeterminación, el PSE-PSOE responde este sábado con nuevas quejas sobre sus compañeros de mesa, aunque evitando, eso sí, pedir que se proscriba la concentración pro-terrorista. El PP ya ha adelantado que lo hará. Como si oyera llover, Pernando Barrena ha avisado de que no cambiarán ni una coma de los Estatutos de Batasuna-ETA, desmintiendo al periódico El Correo.

El parlamentario de PP-UPN Jaime Ignacio del Burgo exigió este viernes a Rubalcaba que de explicaciones sobre la posible "orden directa" del ministerio del Interior de no investigar las últimas cartas de extorsión de ETA , como denuncia la revista Época Navarra. Del Burgo calificó esta orden de "escándalo monumental". Además, el diputado navarro dijo que si se confirma que el móvil utilizado en el "chivatazo" de la Policía al etarra Elosúa pertenece a la unidad de Telesforo Rubio se demostraría que el encargado de la lucha contra ETA está "al servicio de los intereses políticos del Gobierno".

Las Fuerzas de Seguridad del Estado tienen conocimiento del envío durante el presente mes de julio de cartas de extorsión por parte de ETA a empresarios de Navarra y Vizcaya, según confirmaron a Europa Press fuentes de la lucha antiterrorista. Las misivas corresponden a una misma remesa y en ellas se les reclama entre 30.000 y 70.000 euros en un "tono amable". Un conocimiento que se hace público poco después de que el PSOE pusiese en duda la existencia de las nuevas cartas de extorsión.