L D (EFE) Mazen se reunió este lunes por la noche con los líderes de todas las facciones a fin de estudiar las últimas posibilidades para salvar la crisis política en la Autoridad Nacional Palestina (ANP), que se origina en sus divergencias con el primer ministro palestino, Ismail Haniye, del grupo terrorista islámico Hamas.
Tras escuchar a los líderes de todas las facciones y hablar por teléfono con Haniye durante 40 minutos, el presidente palestino llegó a al conclusión de que no queda otra salida que la consulta popular. "El presidente nos ha dicho que no le queda más remedio que convocar un referéndum", afirmó Jalida Jerar, parlamentario del grupo terrorista Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP), al salir de la reunión.
La decisión de Mazen se podría traducir este mismo martes en una convocatoria de referendo para dentro de 40 días, si bien fuentes próximas a la Presidencia informaron de que primero se aconsejará con el Consejo Ejecutivo de la OLP. Los principales obstáculos a las negociaciones inter-palestinas los ha puesto el primer ministro Haniye, quien se negó a aceptar el "Documento de los prisioneros", una propuesta con la que se quería poner fin al boicot internacional contra la ANP.
Esa iniciativa, gestionada desde prisión por el líder de Al-Fatah en Cisjordania, Maruán Barguti, contempla el reconocimiento implícito de Israel por parte de Hamás y limitar la lucha amada contra la ocupación a los territorios de Cisjordania y Gaza. De esta forma, Mazen trata de que Hamas cumpla los requisitos de la comunidad internacional de reconocer a Israel, aunque sólo de forma implícita, pues sólo debería aceptar "las fronteras de 1967", para que la comunidad internacional devuelva sus contribuciones a la ANP, y solventar la crisis económica desatada desde la llegada al poder de los islamistas en marzo, tras su triunfo en las elecciones legislativas palestinas del pasado 25 de enero.
Tras escuchar a los líderes de todas las facciones y hablar por teléfono con Haniye durante 40 minutos, el presidente palestino llegó a al conclusión de que no queda otra salida que la consulta popular. "El presidente nos ha dicho que no le queda más remedio que convocar un referéndum", afirmó Jalida Jerar, parlamentario del grupo terrorista Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP), al salir de la reunión.
La decisión de Mazen se podría traducir este mismo martes en una convocatoria de referendo para dentro de 40 días, si bien fuentes próximas a la Presidencia informaron de que primero se aconsejará con el Consejo Ejecutivo de la OLP. Los principales obstáculos a las negociaciones inter-palestinas los ha puesto el primer ministro Haniye, quien se negó a aceptar el "Documento de los prisioneros", una propuesta con la que se quería poner fin al boicot internacional contra la ANP.
Esa iniciativa, gestionada desde prisión por el líder de Al-Fatah en Cisjordania, Maruán Barguti, contempla el reconocimiento implícito de Israel por parte de Hamás y limitar la lucha amada contra la ocupación a los territorios de Cisjordania y Gaza. De esta forma, Mazen trata de que Hamas cumpla los requisitos de la comunidad internacional de reconocer a Israel, aunque sólo de forma implícita, pues sólo debería aceptar "las fronteras de 1967", para que la comunidad internacional devuelva sus contribuciones a la ANP, y solventar la crisis económica desatada desde la llegada al poder de los islamistas en marzo, tras su triunfo en las elecciones legislativas palestinas del pasado 25 de enero.
La última propuesta del terrorista Haniye para salvar el diálogo fue la de que Mazen diera tiempo a una negociación a tres niveles: primero en Gaza, después en Cisjordania y más adelante en el extranjero, donde se halla la mayor parte de los líderes terroristas de Hamas. Esta propuesta fue estudiada por la tarde en Gaza entre Haniye y los delegados de Mazen. Y por la noche en la reunión del presidente con los líderes de las facciones en la Comisión de Diálogo Nacional, en Ramala.
A última hora de este lunes se cumplió el plazo original que Mazen había dado a su primer ministro para que aceptara el "Documento de los prisioneros", un plazo que después prorrogó en 48 horas para dar tiempo a los negociadores a encontrar una solución. La crisis política coincide con las amenazas mutuas entre los terroristas de las Brigadas de los Mártires de Al-Aksa, afiliadas a Al-Fatah, y los Batallones Izadin Al-Kasam, afiliados a Hamas.
Portavoces de ambos grupos terroristas advirtieron este lunes por la noche que atacarán a cualquiera que amenace la vida de cualquiera de sus dirigentes u hombres en el terreno. Este domingo un terrorista de Hamas y su mujer murieron abatidos al parecer por hombres de las Brigadas de Al-Aksa, y este lunes, durante los funerales, terroristas de Hamás asaltaron las oficinas de la televisión palestina en el sur de Gaza, donde destruyeron el mobiliario y una antena repetidora.
A última hora de este lunes se cumplió el plazo original que Mazen había dado a su primer ministro para que aceptara el "Documento de los prisioneros", un plazo que después prorrogó en 48 horas para dar tiempo a los negociadores a encontrar una solución. La crisis política coincide con las amenazas mutuas entre los terroristas de las Brigadas de los Mártires de Al-Aksa, afiliadas a Al-Fatah, y los Batallones Izadin Al-Kasam, afiliados a Hamas.
Portavoces de ambos grupos terroristas advirtieron este lunes por la noche que atacarán a cualquiera que amenace la vida de cualquiera de sus dirigentes u hombres en el terreno. Este domingo un terrorista de Hamas y su mujer murieron abatidos al parecer por hombres de las Brigadas de Al-Aksa, y este lunes, durante los funerales, terroristas de Hamás asaltaron las oficinas de la televisión palestina en el sur de Gaza, donde destruyeron el mobiliario y una antena repetidora.