
LD (EFE) Los ex generales argentinos Antonio Bussi y Luciano Menéndez fueron condenados a cadena perpetua por el secuestro, las torturas y desaparición del ex senador Guillermo Vargas Aignasse, durante la última dictadura militar (1976-1983). Se trata de la primera condena por delitos de lesa humanidad que recibe Bussi, de 82 años, gobernador de la provincia de Tucumán (noroeste de Argentina) durante el Gobierno militar y en democracia (1995-1999).
Sin embargo, el Tribunal Oral en lo Criminal Federal de Tucumán concedió el beneficio de la prisión domiciliaria a Bussi, lo que ocasionó incidentes frente a la sede judicial por enfrentamientos entre miembros de las fuerzas de seguridad y organizaciones humanitarias y partidos de izquierda. La Policía tuvo que utilizar gases lacrimógenos para dispersar a los manifestantes.
Los ex militares fueron sentenciados por homicidio con alevosía, privación ilegítima de la libertad, violación de domicilio e imposición de tormentos agravados. Ambos fueron juzgados por los delitos cometidos en 1976 contra Vargas Aignasse, a quien Bussi aseguró entre lágrimas "no haber visto" en su vida.
Menéndez, de 81 años, fue condenado también el pasado 24 de julio a cadena perpetua en la provincia de Córdoba (centro), en este caso por el secuestro, tortura y asesinato en 1977 de cuatro militantes políticos.
