LD (EFE) En una larga intervención transmitida por televisión este domingo por la noche, el dictador cubano Fidel Castro dijo que "cuando el estatus del feroz terrorista (Posada Carriles) sea revisado, el pueblo de la capital marchará temprano, con toda su impresionante masa revolucionaria, disciplina y unidad frente a la Oficina de Intereses del gobierno fraudulento y bastardo de Bush, que constituye la peor amenaza para la paz del mundo".
Inmediatamente después, la televisión cubana comenzó a emitir anuncios convocando la movilización con lemas alusivos a la situación del "terrorista" Posada Carriles, acusado por La Habana de múltiples actos terroristas y de planear un atentado contra el propio Castro.
La protesta servirá también para responder a la última "provocación" de Washington: la instalación de grandes pantallas luminosas en la sede de la Sección de Intereses de EEUU en La Habana que proyectaron la pasada semana artículos de la Declaración Universal de los Derechos Humanos.
En medio de un rosario de descalificaciones contra el gobierno de "mentirosos redomados, mentecatos y descarados" que preside Bush, y contra el jefe de la Sección de Intereses de EEUU en La Habana, Michael Parmly, a quien se refirió como "idiota, bandido y tipejo", entre otros insultos, Castro ofreció un detallado relato de la evolución de este nuevo "desencuentro" con su enemigo histórico.
