
LD (Agencias) El Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba, a través del Centro de Prensa Internacional de La Habana (CPI), anunció, mediante una nota remitida a corresponsales y embajadas europeas, que el régimen ha decidido suspender las visas a periodistas durante el mes de agosto. El texto advierte que no serán concedidas "ni para reportajes sobre el estado de salud de Fidel Castro, ni para cualquier otro asunto". Las únicas visas de prensa que serán otorgadas en septiembre, dice el documento oficial, "serán otorgadas para la Cumbre de Países No Alineados" que tendrá lugar en La Habana entre el once y el trece de agosto. La institución añade que las solicitudes para cubrir los eventos por el cumpleaños del dictador serán mantenidas pero trasladadas hasta el mes de diciembre (que es cuando se llevarán a cabo)".
De acuerdo con varias agencias informativas internacionales, fuentes diplomáticas europeas explicaron que las restricciones informativas comenzaron desde el viernes veintiocho de julio, tres días antes del traspaso de poderes. De acuerdo con los informes, tres enviados europeos vieron canceladas sus visas profesionales solicitadas con un mes de antelación. Según la agencia de noticias AFP, cuatro reporteros (dos estadounidenses, uno peruano y otro chileno) denunciaron haber sido deportados por intentar ingresar a la isla para informar.
Más de 150 periodistas de todo el mundo han solicitado los correspondientes visados de prensa a las autoridades cubanas desde la noche del lunes para poder desarrollar su trabajo en el país. Un responsable del CPI declaró que "hay un interés muy grande entre la prensa de todo el mundo, pero no se puede hacer periodismo con visa de turismo. Es necesario pedir una visa de prensa y esperar el trámite, como en cualquier otro país".
Bush: apoyo "a la democracia y libertad"
En tanto, mediante un comunicado de prensa emitido por la Casa Blanca, el presidente de EEUU, George Bush, instó al pueblo cubano a "trabajar en pro del cambio democrático" y prometió el total apoyo de su país en un proceso de transición "a la democracia y la libertad". Su administración, dice el mandatario "supervisa de manera activa la situación en Cuba. En estos momentos de incertidumbre en Cuba, una cosa está clara: EEUU está absolutamente comprometido con el apoyo a las aspiraciones del pueblo cubano en favor de la democracia y la libertad".La declaración del presidente es la primera y más tajante en favor de un cambio democrático emitida hasta el momento por el Gobierno de EEUU desde que se conoció la enfermedad de Castro. Washington, que supo de la noticia por los medios de comunicación, tardó en reaccionar y en un primer momento se limitó a apuntar que el traspaso de poderes a Raúl Castro no representaba ningún cambio real.
En su comunicado, Bush se pronuncia claramente acerca de la posibilidad de que se abra un proceso de cambio en la isla. El presidente insiste en que "en el caso de una transición en el Gobierno cubano, estamos listos para aportar la ayuda humanitaria que se precise para ayudar al pueblo cubano". Recuerda que "desde hace mucho EEUU ha tenido la esperanza de tener a una Cuba libre, independiente y democrática como un vecino y amigo muy cercano. A la hora de lograrlo, el pueblo cubano puede contar con el apoyo pleno e incondicional de EEUU."
Hermetismo desconcertante
Al cumplirse un día más de la sucesión provisional, el general Raúl Castro sigue sin aparecer públicamente. La hermética situación está desatando toda clase de rumores que abarcan desde la muerte de Castro hasta una supuesta depresión en la que se encuentra sumido su hermano menor. Varios portavoces de los principales departamentos del Gobierno de EEUU han admitido que no tienen la más mínima idea de lo que sucede en estos momentos en los entretelones del poder cubano.
En La Habana, la llamada presencia "policial persuasiva" ha aumentado con discreción. Los Comités de Defensa de la Revolución y las Brigadas de Respuesta Rápida, grupos de ciudadanos considerados los "ojos y oídos" del régimen en los barrios y centros de trabajo están en alerta para repeler actos de la disidencia interna.
En la edición de este jueves, el periódico oficialista Granma publicaba en un recuadro las palabras pronunciadas por Raúl el catorce de junio. Entonces señalaba que el liderazgo de su hermano no es hereditario y que sólo el Partido Comunista Cubano (PCC) como institución puede sucederle. Por ello y según el periódico El País, la isla está siendo gobernada por "un equipo de seis personas" (todos miembros del Comité Central) bajo el mando del menor de los Castro
Pero y según Phil Peters, el vicepresidente del Lexington Institute, un centro de análisis en el estado de Virginia (EEUU), citado por el periódico
The Miami Herald
, opina que al no aparecer aún en público Raúl puede ser un indicio de que Fidel está recuperándose". En otras palabras, afirma, "en la medida en que la condición de Fidel empeore y estemos más seguros de que Raúl va a asumir (el poder), más posibilidades hay de que aparezca públicamente. Pero si sucede lo contrario, es claro que Fidel está mejorando, las cosas están tranquilas en Cuba, y entonces Raúl se quedará donde siempre ha estado, en la sombra, y no entrará a ocupar el espacio de su hermano." 